Durante 21 años, Alfredo Soto Condeso estuvo oculto y huyendo hasta que fue ubicado por la Policía que lo capturó y lo puso a disposición de la instancia judicial que lo condenó a 25 años de prisión, por el abuso sexual al que sometió a un menor de 8 años.

La Sala Penal de Extinción de Dominio y Liquidación de la Corte Superior de Justicia de Arequipa, impuso la condena al sujeto luego de la sustentación que hizo la fiscal superior María Lazo Rodríguez que acusó a Alfredo Soto por la agresión sexual contra el menor, ocurrida en el año 2002.

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Según la acusación fiscal, Soto abusó del niño hasta en tres oportunidades aprovechando la ausencia de la madre que vivía alquilando una habitación en su casa ubicada en el distrito de Hunter.

El menor vivió varios meses atemorizado por las amenazas que recibía del agresor hasta que, estando albergado en el INABIF, contó a las encargadas de esta Casa Hogar las vejaciones a las que fue sometido. El examen médico legal y la pericia psicológica corroboraron los hechos.

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Al enterarse de la denuncia en su contra, Alfredo Soto huyó a la ciudad de Lima donde se mantuvo oculto durante dos décadas hasta que los efectivos de la oficina de requisitorias lo ubicaron y capturaron el 15 de marzo de este año. Además de la condena, el sentenciado debe pagar una reparación civil de 5 mil soles a favor del agraviado y se dispuso que sea sometido a tratamiento terapéutico especializado.