Policía que dijo "si muero, muero de pie" fallece por COVID-19 y es el quinto en Arequipa

El sábado por la noche, el nuevo coronavirus cobró su quinta víctima en las fuerzas policiales. El suboficial Walter Gárate Guevara (59) dejó de respirar en una de las camas de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Honorio Delgado. El lunes por la mañana fue despedido con honores por sus compañeros de trabajo.

Gárate, quien durante 35 años prestó servicio en la Policía, se contagió durante su trabajo en la comisaría de Cerro Colorado, donde laboraba desde hace 10 años como operador de uno de los patrulleros y en vigilancia a pie.

Fue uno de los 11 infectados en la comisaría principal del distrito cerreño, y el pasado 17 de junio su estado de salud se complicó, por lo que fue trasladado del hospital de la Sanidad de la PNP hacia el nosocomio COVID del Ministerio de Salud (Minsa).

Sus pulmones demandaban mayor oxigenación y por ello fue internado en una de las camas de la UCI, pero tres días después de su ingreso, el aguerrido agente perdió la lucha contra la enfermedad.

COMPROMETIDO. Gárate era muy querido en la comisaría, no solo por sus años de labor, sino por su entrega al trabajo.

El comisario, comandante PNP Enrique Blanco, recuerda con mucho orgullo ese compromiso, pues cuando el brigadier tuvo la opción de continuar con su trabajo, pero en una oficina, simplemente se negó.

“Se les hizo la consulta a quienes tuvieran más de 50 años, porque podían hacer labores administrativas, pero Gárate me dijo "no, comandante, yo si muero, muero de pie, yo tengo que dar el ejemplo a los jóvenes’”, contó el oficial.

La mañana del lunes, sus compañeros le rindieron honores durante su traslado al cementerio Parque de la Esperanza. Su féretro pasó frente a la dependencia policial y allí, en la puerta de ingreso, se situó su madre para recibir su gorra de manos del coronel Francis Alarcón Gallegos, jefe de secretaria de la IX Macrepol de Arequipa.

CONTAGIOS. Durante los 100 días de cuarentena por la presencia del coronavirus, el Comando de la Región Policial de Arequipa ha realizado 6 mil 663 pruebas al personal policial, detectándose el contagio en 558 efectivos. De ellos, 203 han superado la enfermedad y se han reincorporado al trabajo de patrullaje en las calles.

Del personal que aún tiene sintomatología, 10 se encuentran aislados en un hotel, 14 están hospitalizados (8 en Sanidad de la Policía y 6 en el Honorio Delgado), y uno se encuentra grave en UCI del Honorio Delgado, luchando por restablecerse.

Entre los agentes que perdieron la vida a consecuencia de la pandemia, está un coronel en retiro que fue el primero en morir.

Luego se sumaron los suboficiales Guillermo Meza, que laboraba en el Departamento de Tránsito, así como Dalmiro Paredes, de la comisaría de Acarí y Emilio Ali, de la dependencia policial de Atico, en la provincia de Caravelí.

Walter Garate es el último valiente policía que fue arrancado de su institución por la pandemia. “Lamentamos mucho la perdida de nuestro compañero”, dijo el general PNP Víctor Zanabria Angulo, quien pidió a la población evitar salir de casa para reducir los contagios.

Recuperados. 203 efectivos lograron vencer al virus y retomaron sus actividades tras permanecer en aislamiento.