Huber Valdivia: “De nada servirá poner solo fierro y cemento”
Huber Valdivia: “De nada servirá poner solo fierro y cemento”

El Perú necesita contar con un nuevo Plan Agrario para superar décadas de una improductiva política que ha mantenido alejados al gobierno de los productores, aseguró el ex Viceministro de Agricultura y ex Director Ejecutivo del Programa Subsectorial de Irrigaciones y exasesor del Gobierno Regional de Arequipa, Huber Valdivia Pinto.

¿Por qué es tan difícil desarrollar proyectos agrarios en el país? En los últimos años, el Estado ha caminado por una orilla y el agricultor por la otra y los resultados están a la vista: pérdida de capacidad económica del agricultor, escasa innovación productiva, nula investigación, por decir algunos.

¿No hay forma de revertirlo? Lo haríamos con un nuevo plan agrario que incluya el acercamiento del gobierno por medio del Ministerio de Agricultura a los agricultores y campesinos, con una estrategia de acompañamiento permanente para modernizar la actividad, diseño de estrategias para acceder a créditos y a mercados nacionales e internacionales con miras hacia una agricultura moderna y rentable.

Un problema constante en el país es la falta de agua y los conflictos entre regiones por este asunto. A nivel nacional, la eficiencia de sistemas de riego es de un 30%, el 70 se va en pérdidas de evaporación, mal manejo de sistemas, etc. Una tarea prioritaria en este asunto es mejorar precisamente los sistemas de distribución y uso del agua.

Tenemos que hacer esfuerzos para reservar el recurso en los valles y zonas donde el problema del estiaje es persistente. No hablemos de obras faraónicas sino que debemos abarcar el problema con una visión integral que incluya la reconversión del agro, tecnificación de riego, valor agregado, asociatividad, búsqueda de mercados, entre otros componentes. Nada ganamos poniendo fierro y cemento, esto debe ir acompañado de un plan de desarrollo

¿Este es el caso del valle de Tambo? Si vemos el caso de Tambo y Puno, podemos darnos cuenta que el enfoque de “defensa de la territorialidad” de autoridades frente a proyectos de interés ha limitando su atención. En el PSI se vio una alternativa, que fue Yanapujio para una represa, se hizo el trato con las comunidades y los estudios básicos y ya se dio la concesión a una empresa coreana para la elaboración de los estudios. En noviembre ya debe convocarse a la ejecución de la obra. Esto no significa renuncia a Paltuture, pero no podemos seguir esperando.

El entrampamiento de proyectos, como Majes II es un lío que parece no terminar. En este caso hacemos bien en preguntarnos por qué debemos invertir en el cambio tecnológico 104 millones. Inicialmente el concepto era que la oferta de agua del río Apurimac era insuficiente para lo programado en Siguas, además de la pérdida por filtraciones. Así, la empresa española planteó una adenda, pero en el PSI vimos que no hay una correlación entre el costo y las pérdidas mínimas de agua por evaporación. El planteamiento del PSI fue mejorar la propuesta para lograr el destrampamiento del proyecto.

¿Dónde está el nudo que amarra este proyecto? Hay que cuidar el orden y la formalidad. Partiendo de la propuesta de Cobra, lo primero debió ser que el GRA y Autodema inviten al supervisor para ponerse de acuerdo, pero este primer punto no se ha superado. Luego, el documento formal debía ir a Economía y Finanzas para revisarlo y pasarlo a opinión de Proinversión, retorna al MEF y de ahí va a la Contraloría. Lo que sigue es pasar al GRA (ya aprobado) y de ahí al Consejo Regional, que es donde debe ser aprobado. Si lo vemos así, tenemos para rato, porque no estamos haciendo las cosas bien.

¿Cuál debería ser la posición del Ministerio de Agricultura frente a este problema? Desde ya hay buena voluntad para dar pase a la adenda, pero hay que seguir las formas. Si no hacemos las cosas bien, va a ser observado.

Perfil. Huber Valdivia Pinto, ingeniero agrícola. Ejerció cargos como viceministro de Agricultura y Director Nacional del Programa Subsectorial de Irrigaciones PSI. Fue también consultor.