Lluvias de corta duración, pero de intensidad destructiva

Las lluvias que causaron huaicos, derrumbes y hasta muertes en los últimos años en Arequipa, fueron cortas o de pocas horas, pero intensas.

El jefe zonal del Senamhi, Guillermo Gutiérrez, recordó que el 27 de enero del 2017, una intensa lluvia en el distrito de Uchumayo produjo un huaico en la carretera, producto de ello fallecieron 5 personas.

En febrero de 2018, las precipitaciones en Cono Norte causaron el ingreso de agua y lodo por la quebrada de Añashuayco. Un taxi tico que cruzaba la vía fue arrastrado y uno de sus ocupantes perdió la vida.

Este año, las lluvias de gran intensidad continúan. La semana pasada, un aguacero de dos horas afectó los trabajos de la variante de Uchumayo y generó más de 300 emergencias en la ciudad, entre cortes de energía y desborde de aguas servidas.

El último domingo, las lluvias en el distrito de Chiguata bloquearon el ingreso principal a esta zona y los vehículos quedaron varados.

Además, en Caravelí, una de las provincias donde las precipitaciones pluviales son débiles, se registraron fuertes lluvias, quedando varias viviendas inundadas.