El presidente de la República Martín Vizcarra fue literalmente acorralado en el hospital Honorio Delgado Espinoza en Arequipa, tanto por los médicos como los familiares de los pacientes con coronavirus que no son atendidos de forma oportuna. Sin importar el riesgo de contagio, la mayoría de los presentes incumplió con el distanciamiento exigido por protocolo.

Luego de escuchar las quejas de algunos médicos y parientes de los enfermos, el presidente tuvo que retirarse raudamente de la zona, ante el pedido de la población que exigía que el mandatario ingrese al interior del nosocomio para ver la realidad.

Sin embargo, ante la aglomeración de médicos, pobladores y policías, el presidente Martín Vizcarra abandonó el hospital de forma apresurada.

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Los médicos del nosocomio Honorio Delgado esperaron con pancartas en mano al presidente Vizcarra para denunciar las carencias que tienen para cumplir con sus labores de atender a los pacientes con coronavirus.

Además de la falta de pago, reclamaron la falta de entrega de implementos de bioseguridad, la falta de agua para ducharse y servicios básicos como para que los médicos mantengan su higiene y protección, para evitar contagiarse con el nuevo coronavirus e infectar a sus familiares.

“No hay camas, nos parte el alma ver a los pacientes en el exterior”, dijo una profesional.

Como respuesta, Vizcarra argumentó que el Gobierno transfirió recursos a Arequipa para descentralizar y acelerar la atención a los enfermos con las COVID-19.

Por otro lado, los pobladores que se encontraban en el hospital con arengas contra el gobernador Elmer Cáceres Llica, reclamaron la lentitud de las autoridades para implementar más camas de hospitalización y permitir que las personas mueran por la falta de atención.