Juliett C.C. de sólo 14 años, es la identidad de la menor que fue asesinada y luego arrojada a un canal de regadío ubicado en el lateral 3 de la Irrigación EL Cural, en el límite de los distritos de Sachaca y Tiabaya en Arequipa. La víctima de feminicidio tuvo una vida marcada por el maltrato y hasta sufrió un presunto abuso sexual que fue denunciado ante la Policía.
La identificación de la víctima la realizaron los peritos de Medicina Legal y ayer por la tarde su madre, de nombre Yenci, acudió a la morgue para reconocer el cadáver de Juliett que fue estrangulada antes de ser arrojada en el canal de riego de El Cural, donde no existe mayor rastro del feminicida que aprovechó la oscuridad de la noche para deshacerse del cadáver de la menor que no estaba reportada como desaparecida durante las últimas semanas, ya que su madre sabía que su hija se había retirado de su casa para, supuestamente, para independizarse.
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VIDA MARCADA
La vida de Juliett estuvo marcada por episodios de maltrato, presuntos abusos, abandono y fugas, sus padres biológicos viven separados y parte del tormento que sufrió la menor está registrado en la comisaría de Tiabaya. La primera vez que el nombre de Juliett ingresó al registro de la Policía fue un día después de la Navidad de 2022 cuando su padre biológico acudió con ella a la comisaría para denunciar que su hija fue presuntamente violada por su padrastro en su vivienda.
El 1 de junio, nuevamente el progenitor de Juliett se presentó en la misma comisaría de Tiabaya, aquella vez fue para denunciar que su hija había desaparecido aprovechando que su madre había salido de su casa a trabajar; no obstante, Yenci, madre de la menor, acudió a la dependencia policial 13 días después acompañada de su hija para afirmar que no estaba extraviada, sino que había permanecido con ella en su casa.
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DESAPARICIÓN
Aparentemente, Juliett se sentía abandonada por sus padres. la menor tenía la cicatriz de una herida mal curada en la pantorrilla de la pierna izquierda que cubría con una venda. A mediados de septiembre del 2023 se marchó de su casa y sólo retornaba esporádicamente con la única intención de visitar a su hermana menor, aprovechando la ausencia de su madre. Trascendió que la adolescente trabajaba como moza en una pollería y parte de lo que ganaba lo usaba para comprar cosas para su hermana.
La menor no volvió al lado de su madre sino hasta enero de este año y permaneció en casa hasta el viernes 2 de febrero, cuando una vez más decidió irse sin decir a dónde, aparentemente había conocido a un hombre con quien habría estado acompañada durante todo este tiempo.
Después de este último episodio, ninguno de sus padres hizo denuncia alguna sobre su desaparición y solo Yenci supo ayer la ubicación de su hija en la morgue central de Arequipa. La noche de ayer, la madre acudió a la oficina de Homicidios de la Divincri para dar su declaración formal ante los detectives con la finalidad de brindar alguna pista que permita esclarecer el feminicidio de la menor a quien le arrebataron la vida antes de que pudiera cumplir 15 años este próximo 23 de febrero. Lo detectives esperan que la información sea útil para realizar diligencias que permitan ubicar al autor del crimen.