Las familias desalojadas de la zona de Villa Magisterial, del distrito de Cerro Colorado, se niegan a dejar los terrenos que ocuparon desde el año pasado y permanecen a un costado de los escombros, donde preparan ollas comunes esperando volver a instalarse.
“No nos vamos a ir, vamos a seguir aquí con las ollas comunes, porque no tenemos a dónde ir”, dijo Julia, una de las madres que preparaba ayer el almuerzo. Tenía el ojo morado porque le cayó un golpe de palo cuando intentaba recuperar sus coscas que eran retiradas por maquinaria pesada el lunes.
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Algunos de los pobladores no quieren responsabilizar por la tragedia a los dirigentes que les hicieron creer que podían ocupar terrenos del Estado y a quienes pagaron entre 15 mil y 25 mil soles.
Para ellos, el único responsable es el procurador de la Municipalidad Provincial de Arequipa, quien no los escuchó el día del desalojo, cuando vieron perder no solo el dinero que le entregaron a quienes los estafaron, sino que también sus precarias construcciones, aunque algunos tenían viviendas de dos pisos que también fueron derruidas.
Terrenos estaban destinados para un programa de vivienda
Consideran que hubo abuso de autoridad al retirarlos sin previa comunicación y sin ser escuchados, pero el subgerente de Asentamientos Humanos, Helber Begazo, aseguró ayer que no hay ningún trámite de la directiva ante la municipalidad para la ocupación formal de los terrenos que estaban destinados para un programa con el Ministerio de Vivienda.
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Cabe precisar que el procurador Mario Farfán señaló el lunes que hubo reiterados comunicados de desalojo a los directivos, porque aprovecharon la pandemia para instalarse de manera ilegal.
Acuerdo de ocupación de terrenos fue en zonas consolidadas
Correo intentó comunicarse con los directivos de la urbanización, pero ninguno estaba en la zona.
Los pobladores indicaron que estaban presentando denuncias junto a los abogados.
Los desalojados coincidieron que los hijos y familiares de los habitantes de Villa Magisterial ocuparon los terrenos luego de aprobar en asamblea el pago de 15 mil soles para hacer los trámites de formalización, instalación de agua, desagüe, electrificación, entre otros.
Sin embargo, otro vecino de la zona, Fredy Mendoza, aseguró que el acuerdo fue ocupar los pocos terrenos desocupados, pero en las manzanas ya consolidadas y formalizadas y no en los espacios libres que fueron destinados para áreas verdes o carreteras como la vía interconectora de los distritos.
En la zona se hacían las zanjas para instalar agua y desagüe con los recursos obtenidos de los socios, pero el gerente de Sedapar, Juan Carlos Córdova, aseguró que entregaron la autorización, bajo el visto bueno de la Municipalidad de Cerro Colorado, pero, lo suspendieron hace dos meses, cuando surgió el problema de la informalidad.
30 familias desocupadas por segunda vez
Pilar es una joven madre que asegura que junto a 30 personas son desalojadas por segunda vez, el primero fue en 2017, de un terreno considerado zona de riesgo y ubicado a unos metros de distancia del último desalojo, pero a la fecha, este espacio es ocupado por otras familias y ya no pertenece a Villa Magisterial, sino a Villa Perú.
Helber Begazo manifestó que esta zona también está en manos de la Procuraduría, luego que con la intervención de la Fiscalía se les dio un plazo para desocupar.
Norma. Los pobladores no podrían formalizarse en el lugar, porque la Ley 31056 formaliza ocupaciones de hasta diciembre de 2015 y con pago arancelario.