“Muy cerca de mi Redentor, allí podré yo descansar al fiel amparo de su amor. Muy cerca de mi Redentor, seguro asilo encontraré, me guardará del tentador, y ya de nada temeré”, es parte de la letra de la canción adventista que acompañaba el recorrido al cementerio del cortejo fúnebre de Roberto Castillo Laura, uno de los fallecidos en el accidente de Rey Latino.

El arquitecto de 46 años era uno de las 44 que murieron en ese viaje el miércoles por la madrugada en Ocoña (Camaná) y sus restos fueron ayer enterrados en el camposanto Parque de la Esperanza en el distrito de Cerro Colorado, a las 14:00 horas.

“Partiste de un momento a otro y eso es algo que difícilmente entenderemos, sin embargo, nos consuela saber que estás descansando en la gloria del Señor, hoy te has convertido en un ángel que cuidará de todos”, dijo en su participación, el compañero de trabajo de Roberto, Arnaldo Ramos Cuba.

Las cerca de 100 personas que participaron en el último adiós de “Robertito”, como era llamado cariñosamente el jefe del área de Arquitectura del Instituto Nacional de Cultura (INC) , no pudieron evitar las lágrimas al ver descender el cajón que contenía el cuerpo.

“A nombre de la familia Castillo Ojeda, debo decir Robertito que siempre te recordaremos y cuidaremos de tu familia al igual que lo hubieras hecho”, manifestó Mario Miranda, amigo de la familia.

BONDAD. 

Tras el entierro, uno de los ocho hermanos de Roberto, Willy Castillo Laura, manifestó que lo recordará como un hombre solidario que siempre estaba al pendiente del bienestar de su familia.

“Siempre fue bueno, nos aconsejaba mucho, siempre nos apoyó en los estudios... era my alegre, nunca hablamos de una posible muerte”, contó a Correo. Willy recordó que el segundo de los nueve hermanos había viajado una semana antes a Chala para visitar las playas, sin embargo, tuvo que regresar por trabajo.

“Todos los años iba a la casa de su cuñado a veranear con su esposa y tres hijos (19, 16 y 6 años de edad), que ahora se quedaron solos... sin embargo, nosotros los apoyaremos”, acotó.

INC. 

Roberto Castillo Laura se desempeñaba como jefe del Área de Arquitectura del INC desde el 2011 y su carisma y simpatía era contagiada a los demás trabajadores.

“Fuimos testigos de tu compañerismo y tu elevado y honroso sentido de alegría y amistad, y sobre todo profesionalismo... Siempre estuviste cerca con tus planteamientos, sugerencias... continuaremos con tus inspecciones, siempre defendiendo el Centro Histórico de Arequipa”, acotó Ramos Cuba.