Existen muchos motivos para sentirse orgulloso de esta tierra gracias a su cultura y arquitectura; sin embargo, Huamanga llega a sus 478 aniversario de fundación colapsada en el transporte, inmersa en la informalidad y caótica por la ejecución de las obras del drenaje.
Historia. El capitán español Vasco de Guevara fundó Huamanga el 25 de abril de 1540 con el objetivo de facilitar el viaje hasta entonces bastante peligroso entre Lima y Cusco, para adicionalmente controlar, catequizar y cobrar tributos a los nativos. La ciudad se desarrolló rápidamente y fue residencia de encomenderos y nobles que construyeron imponentes casonas y preciosos templos.
Al 2015, con una población de 277 mil 224 habitantes, Huamanga tiene hoy, 16 distritos, cinco de ellos metropolitanos y once rurales.
Actualmente el 90% de la población huamanguina cuenta con el servicio de electrificación, mientras que un 10% aún carece del servicio, principalmente en las zonas rurales y algunas zonas periurbanas de los distritos metropolitanos, según la Empresa Prestadora del Servicio de Electrificación.
En cuanto al servicio de saneamiento básico y agua potable, uno 216 mil 712 huamanguinos cuentan con el servicio según la EPS SEDA Ayacucho; de los cuales 198 mil 832 cuentan con agua potable, 176 mil 194 con alcantarillado hasta el presente año.
“En el último año, disminuyó la percepción de inseguridad, estamos en el cuarto lugar a nivel de país y ello se debe al trabajo psicoeducativo que se hace con los padres de familia, la percepción de seguridad permite que haya más turismo y ello genera desarrollo económico”, señala el alcalde de Huamanga Hugo Aedo.
Durante los últimos cuatro años, se ha mejorado en la recolección de residuos sólidos principalmente en la capital de la provincia, gracias a la implementación de la Unidad de Residuos Sólidos, el cual, según la directora, Maribel Canchari, ha permitido coberturar a un 100%.
En relación con el transporte, el burgomaestre huamanguino admite que la zona metropolitana está colapsada a falta de infraestructura moderna, es por esa razón que planteo el proyecto del puente bicentenario a fin de descongestionar la ciudad en parte.
De otro lado, las brechas sociales relacionadas a la anemia y desnutrición continúan; sin embargo, Aedo refiere que ello requiere un cambio de actitud de toda la población en conjunto con las autoridades.
Finalmente, refiere que la falta de fuentes de trabajo en la ciudad es la causa de la informalidad.