La madre admitió que golpeó al menor porque no consiguió papel para prender fuego y así calentar a sus animales.
La madre admitió que golpeó al menor porque no consiguió papel para prender fuego y así calentar a sus animales.

Admitió su delito y logró atenuar la pena impuesta por las autoridades. La Fiscalía Provincial Mixta de Conchucos logró que se condene a 87 jornadas de prestación a la comunidad a una madre de familia que golpeó en la pierna y cadera a su hijo, un niño de 7 años.

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La agresión ocurrió en el distrito de Pampas, en la sierra de Áncash.

El fiscal a cargo del caso, Isidro Chacón Amador, demostró la responsabilidad de Wilma Fernández Rosales como autora del delito contra la vida, el cuerpo y la salud, en la modalidad de agresiones contra integrantes del grupo familiar.

La mujer deberá prestar servicio comunitario en la Municipalidad Distrital de Pampas en las actividades que la comuna designe.

Los hechos

Según las investigaciones, el 3 de julio del 2021, el menor fue golpeado en la pierna y cadera en un arranque de ira de su joven madre debido a que no consiguió papel para prender fuego y así calentar a su cerdo pues el frío que azota esta parte de la sierra de nuestra región es intenso.

En medio del llanto y con las huellas de las lesiones que sufrió, el menor logró escapar de la vivienda y se refugió en la casa de su abuela paterna, cerca de su domicilio.

Conmovida por las lágrimas de su nieto, la mujer llevó al menor al encuentro de su padre.

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Este último, luego de escuchar la versión de su hijo, acudió a la comisaría de Pampas para presentar la denuncia correspondiente ante las autoridades del sector.

El Ministerio Público de inmediato inició las investigaciones e interrogó a todas las partes involucradas.

Posteriormente, a Wilma Fernández Rosales no le quedó más remedio que admitir su culpa para atenuar la sentencia en su contra.

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