El exgobernador de Áncash, César Álvarez, utilizó su cuenta de Facebook -que es administrada por personas de su entorno- para cuestionar la decisión del Poder Judicial de ampliar por 12 meses su prisión preventiva por el caso “La Centralita”.
Reiteró que la investigación que se le sigue a él y otras 69 personas, por lo que se ordenó su encarcelamiento, se trataría de “una venganza de Ollanta, Nadine y Otárola” por reclamar el recorte del canon minero.
Además, manifestó que no existirían pruebas que lo comprometan en el referido caso o en la muerte de el exconsejero Ezequiel Nolasco. Asimismo, consideró que esto se trataría de una “persecución política”, a fin de que no recupere su libertad y vuelva a postular.