Es miércoles por la mañana. Roberth Bances Acosta (40) se queda algunos instantes en silencio, mira al vacio y responde: “De milagro... no sabemos cómo (nos hemos salvado)”. El pescador ensaya esta respuesta sentado en la banca de una clínica del centro de Chimbote; fue trasladado hasta este lugar para ser sometido a una revisión médica, junto a sus tres compañeros que también se encuentran con vida gracias a lo que solo puede ser explicado como un milagro.

Lamentablemente, la mencionada intervención divina solo alcanzó a cuatro personas. Los otros ocho tripulantes de la embarcación María Esperanza II no pudieron ser rescatados, tras el choque con la nave industrial Malena, a cinco millas del puerto de Chimbote.

“Cuatro nos hemos salvado. Ocho estaban dentro de la cabina, se han quedado (en el barco)”, agrega Bances.

TRAGEDIA. El accidente en el mar se registró a las 2:30 a.m. del miércoles, tan solo un día antes del inicio de la primera temporada de pesca de anchoveta en la zona norte-centro del país.

Según información de la Capitanía de Puerto de Chimbote, la nave industrial de fierro Malena, con 224 toneladas de capacidad de bodega y perteneciente a la empresa Austral Group, se encontraba regresando al puerto de Chancay cuando chocó con la embarcación tipo “vikinga” María Esperanza II, de 47 toneladas de capacidad de bodega, la cual había zarpado de Chimbote apenas media hora antes del siniestro.

El fuerte choque ocasionó que la segunda nave termine hundiéndose en el mar.

Algunos tripulantes de la embarcación Malena lograron lanzarse al agua y, tras aproximadamente 20 minutos, fueron rescatados por la tripulación de la nave industrial.

“(Hemos estado en el agua) 20 minutos. Los mismos tripulantes del barco que nos ha chocado, ellos mismos nos han recogido”, contó Roberth Bances, uno de los sobrevivientes. También corrieron la misma suerte Ivo Leonardo Gil Samamé, Máximo Chaname Fiestas y Miguel Ángel Nicolás Urcia.

DESAPARECIDOS. Son ocho los tripulantes de la embarcación María Esperanza II quienes desaparecieron tras el violento choque.

En lista figura el patrón de lancha, Oscar Quicio Castro (48), quien desapareció en el mar junto a su hijo Dan Kalet Oscar Quicio Zeña (20).

También no han sido ubicados los tripulantes Walter Wilson Ipanaqué Sánchez, Elisban Zeña Urcia, Carlos Esqueche Carrasco, Wilmer Effio Effio y Santiago Huamanchumo. El último desaparecido es Jesús Salvador Villegas Abreu, un ciudadano venezolano.

El personal de la Capitanía de Puerto informó que en la declaración de zarpe de la nave “vikinga” solo figuraban 11 tripulantes, por lo que la persona no autorizada para pescar era Dan Quicio.

También se precisó que Santiago Huamanchumo y el venezolano no estaban inscritos en el zarpe, y se hicieron a la mar en lugar de Ronald Sandoval Vidaurre y Joel Palma Leitón.

BÚSQUEDA. Personal de la Capitanía de Puerto de Chimbote realiza desde ayer labores búsqueda de los ocho desaparecidos con una patrullera. También se informó que seis buzos de la Marina de Guerra se sumaron al rescate de los tripulantes desaparecidos.

Embarcaciones de la zona también vienen apoyando en la búsqueda.

Si bien las autoridades califican solo como desaparecidos a los ocho tripulantes de la nave “vikinga”, para los sobrevivientes, sus compañeros ya han dejado de existir y piden que se haga todo lo posible por ubicar sus cuerpos.

“Queremos que busquen a mis compañeros, que los traigan nada más, porque ya sabemos que están... están muertos”, solicitó Roberth Bances.

Vale mencionar que la embarcación y los tripulantes de María Esperanza II provienen de la caleta Santa Rosa, ubicada en Lambayeque.