La Contraloría inició inspecciones en los centros de abastos a fin de verificar que los administradores estén implementando las medidas de bioseguridad para garantizar que comerciantes y clientes no se contagien de la COVID-19.
Los primeros mercados en ser inspeccionados fueron Virgen de Fátima y Mercado Popular, ambos ubicados en Huaraz.
Para el expendio de víveres, los comerciantes deben utilizar EPP además de acondicionar sus puestos para que el comprador mantenga su distancia con vendedor y producto