El exgobernador regional de Áncash, Waldo Ríos, rechazó acogerse a la conclusión anticipada en el juicio que afronta por el presunto delito de inducción al voto debido a la promesa de entregar 500 soles a cada familia con recursos el canon minero.
La exautoridad regional no aceptó los cargos imputados en su contra por el Ministerio Público, el cual ha pedido como sanción la pena de 2 años efectiva de cárcel.
“Por varios años me han satanizado de manera injusta”, expresó a través de vídeo conferencia desde el penal Víctor Pérez Liendo.
Con esto, el juzgado determinó continuar la próxima audiencia el 6 de febrero, desde las 3:00 de la tarde. En esta diligencia, Waldo Ríos será sometido a un interrogatorio por parte del Ministerio Público y de la Procuraduría Anticorrupción.