Alcaldesas tomaron las riendas de sus municipalidades
Alcaldesas tomaron las riendas de sus municipalidades

Las dos únicas mujeres que llegaron hasta las alcaldías de las municipalidades provinciales de Grau y Antabamba, en Apurímac, iniciaron sus funciones como autoridades tras juramentar al cargo en medio de la expectativa general.

Resulta que Lilia Gallegos Cuellar (Grau) así como Rocío Narváez Choquecahuana (Antabamba) tienen algo en común, lograron imponerse en territorios donde el machismo es predominante como ocurre por lo general en las sociedades andinas.

Pero además, son las primeras mujeres que alcanzaron esta investidura en toda la vida política de sus respectivas provincias. No es para menos porque ahora tienen doble responsabilidad: realizar un buen trabajo y dejar bien puesto el sello de género en la gestión edil. Y ahí está el gran reto.

Lilia Gallegos, tras asumir las riendas de la comuna provincial de Grau dispuso una reorganización inmediata del sistema administrativo, revisión de los proyectos de inversión paralizados y el inicio de una auditoria a la gestión saliente.

Por su parte, Rocío Narváez, anunció la elaboración del estudio de perfil para el asfaltado de la carretera Santa Rosa – Antabamba mediante el Programa ProRegión que fue dado a conocer por el presidente Martín Vizcarra y que constituye una demanda bastante sentida por la población, así como también, la renovación de pistas y veredas de todo el casco urbano de la capital provincial.

De acuerdo a los resultados de las últimas elecciones regionales y municipales (ERM2018) de los 7 alcaldes provinciales electos, 2 son mujeres y de los 76 alcaldes distritales elegidos por voto popular todos fueron varones.

Asimismo, de los 59 regidores provinciales, 15 son mujeres; mientras que de los 380 regidores distritales en toda la región, 133 son respetables amas de casa, trabajadoras, estudiantes, profesionales y empleadas.

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