Por 60 días fue declarado el estado de emergencia en las siete provincias por sequía meteorológica como consecuencia del Fenómeno del Niño que ha diezmado gran parte de los cultivos en la región Apurímac.
La esperada decisión se concretó mediante Decreto Supremo N° 035-2016-2016, publicado ayer en el diario oficial y refrendado por la totalidad de los integrantes gabinete ministerial.
De acuerdo a los informes incluidos en la referida norma, desde febrero del 2016 se ha registrado la disminución significativa de las precipitaciones pluviales por debajo de su promedio normal, además que estas fueron irregulares, afectando en forma directa la ganadería y agricultura.
“Los distritos en Apurímac en su gran mayoría no cuentan con infraestructura de riesgo como reservorio s o represas, por lo que la escasez de agua aumentaría las afectaciones y pérdidas en la ganadería y agricultura hasta los meses de junio y julio del año en curso”, precisa el decreto supremo.
Asimismo, dispone que cada sector involucrado deberá coordinar y ejecutar acciones inmediatas para la respuesta y rehabilitación de las zonas afectadas, y las cuales deberán estar sustentadas en los estudios técnicos elaborados por las entidades competentes.
Sobre el financiamiento para enfrentar la emergencia, el decreto también precisa que los recursos se obtendrán de los presupuestos institucionales de cada entidad de acuerdo a la normatividad vigente.
En Abancay y otras provincias, organizaciones de regantes y agricultores anunciaban el reinicio del paro indefinido que fue suspendido a espera que salga la declaratoria. En próximas horas se conocerán las decisiones adoptadas en sus respectivas asambleas internas.