Sólo en el 2020, 11 personas perdieron la vida en Cusco en incendios forestales, cifra desconcertante que ha llamado la atención de las autoridades y la población, sin embargo, la costumbre de realizar quema de pastizales aún no es desarraigada de la Región Imperial, siendo así que recientemente originó un fuerte incendio forestal que cobró la vida de la primera víctima de lo que va de este año.
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Pedro Allpaca Labra de 68 años, es la persona que pereció calcinada la tarde del último jueves en inmediaciones del sector de Anansaya, perteneciente a la localidad de Checca en la provincia de Canas - Cusco.
El cuerpo de la víctima fue hallado sentado, apoyado a un roquedal donde habría tratado de ocultarse de las llamas. Entre sus pertenencias se halló una pequeña mochila y herramientas agrícolas.
Según las autoridades de la zona, fue el propio comunero, quien inició el fuego, al manipular cenizas para preparar sus alimentos, al propagarse las llamas se volvieron incontenibles, y el poblador finalmente pereció en el lugar.
Según las fichas de inspección de daños, en total se quemaron cinco hectáreas de campos, no resultando afectada ninguna propiedad o animales domésticos, además de la lamentable muerte del poblador.
El brigadier CBP José Arellano, Finalmente, jefe de la IX Comandancia Departamental de Bomberos de Cusco, llamó a la población a no realizar la quema de pastizales en terrenos de cultivo, asegurando que los fuertes vientos llevan las cenizas a otros lugares, iniciando fuertes incendios que afectan la flora, fauna, bienes y hasta cobran la vida de pobladores.