Hasta el momento no se precisa las causas de la muerte del comunero Quintino Cereceda Huiza (38) quien el día de ayer habría muerto por impacto de bala durante un enfrentamiento con la Policía por el proyecto minero Las Bambas, en el sector de Choquecca, provincia de Cotabambas, en Apurímac.
Según se informó, desde las 10 de la mañana de ayer un contingente policial junto al fiscal provincial de Cotabambas, Rosell Pacco, procedía a retirar las piedras y tapar varias zanjas de la vía Quehuira – Huancuire, por dónde la empresa transporta mineral en camiones encapsulados a la costa.
Casi a la una de la tarde, cuando faltaba tapar la última zanja y dejar completamente despejada la vía con apoyo de un cargador frontal, un numeroso grupo de pobladores de la comunidad de Choquecca, comenzaron a lanzar piedras y otros objetos contundentes a los policías.
A raíz de este incidente, los efectivos policiales hicieron uso de sus armas para disuadir a los enardecidos comuneros. No se ha podido esclarecer si una de las balas disparadas por los policías impactó en el comunero fallecido.
El incidente dejó una persona muerta y algo más de 20 policías heridos por impactos de piedra, uno de ellos tiene el ojo comprometido, además de una persona detenida identificada como Justo Huillca Chalco.
Cabe precisar al cierre del presente informe, los pobladores mantenían cerrados todos los accesos a la comunidad, impidiendo que la fiscalía realice constataciones sobre las causas que originaron el deceso de Cereceda Huiza.
LAS AGENDAS. Este conflicto por el proyecto minero Las Bambas se recrudece a pesar que días antes representantes de las comunidades de Choquecca, Antuyo, Ayahua, Quehuira entre otras más, participaron en la mesa de diálogo donde se acordó dar solución a una de sus principales exigencias, como el asfaltado de 27 kilómetros de la mencionada vía (Acta de reunión 6.10.2016) por dónde transitan los camiones, sin embargo, todo apunta que existe otra agenda que no necesariamente fue parte de las conversaciones.
A esta medida de fuerza no se sumó la comunidad campesina de Pumamarka que también se encuentra ubicada en el controvertido eje vial minero, toda vez dialogaba con la empresa minera y el Ejecutivo, al igual que Pisaccasa, Yuricancha, Mara, entre otras más.
No se descarta que estas conversaciones unilaterales hayan provocado la airada reacción de los comuneros de Choquecca y alrededores, ya que cada una esperaba sentarse a dialogar con su propia agenda y demandas específicas, precisándose que las comunidades no están en contra del proyecto minero, sino, reclaman mejores beneficios económicos.
Una fuente extraoficial señaló que está de por medio en todas estas comunidades, la revisión de los contratos que autorizaban a la minera de uso de los caminos vecinales, así como también un resarcimiento económico por los impactos ambientales generados, además del pago de un “peaje comunal” por cada uno de los camiones que atraviesan sus territorios comunales hacía la costa peruana.
Mediante comunicado, el Ministerio del Interior lamentó los sucesos ocurridos y el inicio de las investigaciones para el esclarecimiento de la muerte ocurrida, así como la cadena de decisiones que conllevaron la intervención policial.
También puede leer: Al menos un fallecido tras enfrentamiento por minera Las Bambas