Niño casi muere por tragar pila de reloj
Niño casi muere por tragar pila de reloj

Médicos del Hospital Regional del Cusco salvaron la vida de un niño de un año de edad, cuya vida estuvo en riesgo luego de haber tragado una pila de reloj que le provocó serios daños; este miércoles el menor fue dado de alta, completamente recuperado.

El accidente ocurrió todavía el pasado 21 de mayo, la joven madre de tan solo 18 años de edad, Leticia  Fernández, cuenta que mientras ella cocinaba, su hijo comenzó a llorar y vomitar, la madre se percató que había una pila que se hundía en su garganta y no pudo cogerla.

Inmediatamente fue a la posta más cercana a su vivienda, ubicada en el distrito de Sora, provincia de Sucre, región Ayacucho, donde no pudieron ayudarla debido a falta de equipamiento médico, por lo que el paciente fue evacuado a la ciudad de Andahuaylas, donde igual, según la madre, no pudieron hacer nada. Finalmente el día 23 de mayo a insistencia de la mamá fue evacuado en al Hospital Regional del Cusco.

Al llegar al hospital cusqueño, el infante fue atendido rápidamente por médicos especialistas quienes después de someterlo a exámenes de imagenología y de laboratorio, extrajeron el objeto toxico con la ayuda de una torre endoscópica en el servicio de gastroenterología.

Debido a los daños ocasionados por la pila, el niño fue hospitalizado y recibió tratamiento por más de 15 días, pero su recuperación fue óptima. Este miércoles la doctora especialista en pediatría, Cheryl Villafuerte dio la orden de alta al menor indicando que el paciente se retira en buenas condiciones de salud.

"Las pilas son objetos pequeños y brillantes que atraen mucho la atención de bebés y niños pequeños que meten con gran facilidad en la boca o dentro de la nariz. Si se tragan, estas pilas pueden alojarse en el esófago (garganta), y provocar asfixias por atragantamiento o problemas para ingerir alimentos sólidos; pero lo peor es que en menos de dos horas pueden producir quemaduras graves por las reacciones químicas que desencadenan", citó la especialista.