Pobladores bloquean vía y reclaman por trabajos en la zona

Pobladores y transportistas de Lambrama y anexos acataron un paro preventivo de 48 horas en rechazo a los trabajos de mejoramiento que realiza el Consorcio Vial Sierra en la vía Lambrama (Abancay) hasta Héctor Tejada, en Ayaviri (Puno) de 569 kilómetros de longitud.

La medida de fuerza se realizó en el ramal hacía la mencionada localidad apurimeña, dejando completamente aisladas las localidades de Chuquibambilla, Vilcabamba, Micaela Bastidas, Progreso, Challhuahuacho, Haquira, entre otras más.

El presidente del Frente de Defensa de los Intereses del Distrito, Rolando Pereyra, justificó la convocatoria porque pese a los reiterados pedidos de diálogo hasta el momento los representantes del Consorcio Vial Sierra conformado por las empresas Iccgsa y Concar S.A no responden a sus llamados.

Los pobladores reclaman que el Consorcio reduzca el tamaño de las cunetas porque representan un peligro para los vehículos que circulan por la vía, se respete el ancho de la bicapa y no se reduzca sus dimensiones (a 4 metros).

Asimismo, piden la ampliación de la vía en los puntos críticos identificados, construcción de muro contención, regado de la vía por el polvo que se levanta debido al paso de vehículos y colocación de guardavías.

Por su parte, la jefa zonal de Provías Nacional con sede en Cusco, Diana Tupayachi Córdova, a través de contacto telefónico, afirmó que en reunión de trabajo realizada hace un par de meses atrás con todas las partes, incluyendo representantes de la población, se analizó la situación actual de la vía.

En dicha oportunidad la funcionaria precisó que se identificaron 12 puntos críticos considerados como riesgos potenciales, cuyo expediente se encuentra para su aprobación en el Ministerio de Transportes.

Recientemente en esta carretera por falta de mantenimiento, así como por lentitud de los trabajos de conservación, se registraron dos accidentes de tránsito que ocasionaron la muerte de dos personas dejando a otras siete heridas, dos de ellas de gravedad.

Finalmente, se llegó a conocer que la oficina administrativa del Consorcio que funcionaba en la ciudad de Abancay cerró sus puertas para trasladarse a la localidad de Santo Tomás, en Cusco, adeudando a trabajadores y proveedores de servicios.