Varios poblados incomunicados y centenares de vehículos varados, deja a diario en el Vraem la caída de huaicos y el deslizamiento de rocas y tierra sobre las plataformas carreteras.
Esta situación se vio reflejada en la denominada Ruta de Integración Vraem - Cusco, donde usuarios de esta vía reportaron a través de las redes sociales los deslizamientos que impiden el paso de las unidades particulares y de transporte público.
Una de las carreteras más afectadas sería la que une Kimbiri con Kepashiato, donde las constantes lluvias, sumadas a la falta de mantenimiento de las vías, han hecho imposible de sobrepasar la vía.
Otra zona afectada se halla en el ámbito perteneciente a la zona conocida como Quebrada Honda a lo largo del Río Mantaro.
Moradores del sector exigieron a las autoridades locales y nacionales el envío de maquinaria pesada para abrir las carreteras, así como un mantenimiento periódico y preventivo a lo largo de estas vías.