La calma y el sentido común parecen haber retornado a Paucará. Sin embargo, los daños ocasionados a la propiedad pública y privada son cuantiosos, pues aparte de los tres vehículos policiales quemados, “desaparecieron” mochilas, marrocas y atestados policiales.

Entre los perjuicios que se reportan hasta el momento, se supo que varios muebles, televisores, equipos de cómputo, uniformes y laptops que pertenecían a los efectivos policiales y a la comisaría fueron destruidos o desaparecieron, tras el ingreso de la turba.

Del mismo modo, unos siete de los 15 efectivos policiales que prestaban servicio en el lugar, resultaron heridos o con lesiones.

QUEMADOS. Tres vehículos de la Policía Nacional fueron quemados, uno de placa PL-24177 perteneciente a la Unidad de Servicios Especiales y otra de placa PL-7228 perteneciente al Escuadrón de Emergencia y una motocicleta azul.

Además los dos vehículos decomisados a los detenidos por el caso del robo de la retroexcavadora, los cuales iban a servir para las investigaciones, también fueron destruidos. Estos carros son un auto de placa ALS-188 de marca Toyota de color negro y un camión Isuzu de placa W6A-888, en el cual era trasladada la maquinaria pesada.

DENUNCIA. El procurador especializado en Asuntos Contra el Orden Público del Ministerio del Interior, Moisés Vega, formuló la denuncia penal ante la Fiscalía Provincial Mixta de Paucará por el delito contra la paz pública en contra quienes resulten responsables del delito en mención.

Cabe señalar que durante este violento suceso, se habrían infiltrado delincuentes entre la población.