- Llanta de bus se incendia en pleno viaje y más de 60 pasajeros pasan un susto en La Oroya
- Jauja: Auto se hunde en el río Mantaro y familia logra sobrevivir
Una vez más la Carretera Central demostró que no está en la capacidad para recibir cientos de vehículos que vienen a la zona central por el feriado largo ya que, este viernes el pase en esta vía fue muy lento y restringido debido a la gran cantidad de vehículos de todo tipo y tamaño que pasaron por ella de Lima al centro del país y viceversa.
MIRA ESTO: Junín: Sutran fiscaliza 32 vehículos que cubren la ruta Huancayo – Lima
En el sector de La Oroya, hubo varios puntos críticos y cuellos de botella. Uno de ellos fue el sector de Marcavalle y otro se generó en el paradero de Tarma, zona de ingreso a la Selva Central. Los turistas provenientes de la capital pasaban en su mayoría en camionetas particulares. También llegaron varios grupos que se movilizaban juntos en motocicletas .
La llegada de los visitantes estaba programada en la selva central, desde Tarma hasta Chanchamayo y Satipo. También a las regiones de Pasco y Huánuco; mientras que, otro grupo importante buscaba llegar al valle del Mantaro desde Jauja a Huancayo.
La congestión era tanta que solo pasar por la ciudad de La Oroya les demoraba hasta dos horas.
Según señalaron los pasajeros, los buses subieron los costos de los pasajes en casi el 400%. De Lima a Huancayo, dependiendo de la hora, el pasaje fluctúa entre S/100 y S/150.
Los vehículos que brindan el servicio en La Oroya hacia varias ciudades del centro también subieron en casi un 50% el costo de los pasajes, cobrando a Huancayo en minivan S/20 y en auto S/30. Hacia Tarma en auto S/20 y a otros puntos de la selva central hasta S/40.
MIRA ESTO TAMBIÉN: Cientos de turistas llegan a Huancayo y son recibidos con el tradicional Santiago
Por el contrario el pasaje hacia Lima bajó considerablemente, mientras que los autos cobran hasta S/20, los buses llevaban pasajeros a S/10 soles. Las unidades pasaban vacías esperado llegar a la capital.
Una vez más el anuncio de la empresa Deviandes y la Superintendencia de Transporte Terrestre (Sutran) sobre que, no se permitirá el tránsito de vehículos mayores a 3.5 toneladas durante el viernes 27 de julio fue letra muerta. Las pesadas unidades pasaban como si nada por la Carretera Central demorando aun más el pase del resto de vehículos, debido a su tamaño.