Huancayo: Balean a menor por disputa de terrenos

Esta vez la sangre llegó al riachuelo, cerca al canal de riego en Azapampa. Vecinos de la comunidad campesina del lugar se enfrentaron a unas veinte personas a los que acusaban de invasores y querían desalojarlos de la zona. En la gresca, un adolescente que estaba por el lugar porque llegó a trabajar en una chacra, terminó con una bala perdida en el abdomen y otro varón terminó linchado por los comuneros que lo redujeron cuando cayó al riachuelo. Era acusado de invasor y estaba armado por lo cual la turba lo golpeó hasta dejarlo malherido.

Se conoce que todo se habría iniciado la madrugada de ayer cuando los sindicados como invasores llegaron para tomar posesión del predio de más de mil metros cuadrados. Unos cien comuneros estaban cerca al cerro Capillapata para retirar a los ocupantes que habían llegado a la zona e incluso habrían construido viviendas rústicas.

La situación se salió de control y se desató el enfrentamiento. Testigos del lugar refieren que se escucharon al menos cuatro disparos y la explosión de una dinamita. Las casas construidas terminaron reducidas a cenizas porque la comunidad le prendió fuego. “Desde hace cuatro o cincos días estos señores se han instalado en las faldas del cerro. Son oportunistas, invasores que se quieren apropiar de estos espacios para luego venderlos como si fuera lotes. Esto les pertenece a los comuneros”, dijo Juan quien por temor a las represalias prefiere no identificarse. “Esa gente estaba armada e hizo disparos al aire. Una bala le cayó al adolescente Alvaro . H. (14)”, continuó Juan.

HERIDO. Uno de los acusados de ser invasor también terminó herido. Se trata de Gilmer Morales Tafur (23), quien fue trasladado al hospital Carrión por efectivos del escuadrón de emergencia con la cabeza rota y el rostro ensangrentado a causa de los golpes.

Asimismo, enterados del caso, hasta el lugar llegaron los serenos de Chilca que auxiliaron al menor herido. Alvaro fue llevado al hospital Carrión donde controlaron la hemorragia y diagnosticaron que tenía herida producto de un ataque con proyectil, pero esta estable.

Cuando parecía que todo se había calmado, a las 14 horas, aproximadamente, Raúl Mendoza, hijo del presidente de la comunidad sufrió una ataque. Según relató, dos encapuchados ingresaron a su negocio de cabinas de internet, rociaron gasolina y luego le prendieron fuego. “Se han perdido cinco Pcs”, dijo Raúl a la policía que realizaba el peritaje del atentado y sospecha de los invasores.