El cirujano pediatra, Luis Fernández, detalló que, por lo general, los síntomas que presentan los menores con malrotación intestinal no son inmediatos, suelen tolerar su lactancia de manera limitada, pero con el tiempo comienzan los vómitos constantes.
El procedimiento duró más de 2 horas, sumando la cirugía derivativa para la corrección de la parte proximal del intestino, posterior a la cual, el menor presenta una recuperación lenta pero fuera de peligro, complementario a que ya puede lactar.