Nativos de la comunidad Churingabenien, en la provincia de Chanchamayo, pusieron un punto de control dirigido a los vehículos y transeúntes que ingresan a dicho lugar.
Los agricultores no estaban de acuerdo con estas acciones y pidieron una reunión con la subprefecta de Perené Minian Astete, con quien acordaron que el tránsito vehicular esté en vigor de lunes a miércoles y viernes, para evitar así la propagación del virus COVID-19.
En tanto, también se acordó que la “limpia ancestral” continúe para evitar contaminación con la infección.