Postulantes al Congreso por Junín, con pasado: dinosaurios y millennials

Un caso especial es el del partido Fuerza Popular, de Keiko Fujimori. Cuatro de sus 6 candidatos militaron antes en otros partidos. David Jiménez Heredia estuvo antes en el Partido Popular Cristiano (PPC), Ana Patiño Urco fue primero militante de Somos Perú y Rubén Galeas Arana fue primero acciopopulista antes de pasarse al partido naranja.

En agosto del año pasado la Comisión de Constitución del Congreso estableció que la fecha última de afiliación para postular en estas elecciones era el 30 de setiembre. Militantes, aventureros, oportunistas y demás saltimbanquis políticos respiraron tranquilos y corrieron a inscribirse en un partido o renunciar y colgarse de otro. En Junín más de un 50% de candidatos se inscribió a última hora. Entre ellos hay algunos con un historial partidario de admirarse, dinosaurios en la política, y “millennials” (generación nacida entre los años 80 y mediados de los 90) que, a pesar de su corta trayectoria ya han pasado por algunos partidos.

El candidato con mayor insistencia -si de historial partidario hablamos- por lograr el poder es Edgar Reymundo de Juntos por el Perú. El político ha querido ser de todo: regidor, alcalde, gobernador y congresista. En algunos casos lo ha logrado, pero saltando de barco en barco. Primero estuvo en Perú Posible, luego se fue a Unión por el Perú (UPP), luego formó el Bloque Popular de Junín y como nada le funcionaba se metió a Juntos por el Perú.

Otro candidato con interesante historia, aunque poco conocido, es Danilo Izarra Ccorahua. El señor postula con Somos Perú, pero antes militó en Fuerza Regional Allin Kausay, salió de ahí y se pasó a Alianza para el Progreso y esta vez va con Somos Perú; además, postuló como regidor en Ayacucho en 2014.

El candidato de Frente Amplio Yuri Samaniego es otro ágil “gorrión” en los partidos de izquierda. Empezó en Perú Posible, luego pasó al Frente Patriota Peruano, lo pensó mejor y saltó al Partido Nacionalista Peruano y como a éste le iba mal acabó en el Frente Amplio.

Una candidata más que no ha dudado en cambiar de partido con tal de tentar un cargo ha sido Zoila Gonzáles Yurihuamán, hoy parte de Unión por el Perú. Ella militó en Victoria Nacional, luego Acción Popular, cruzó al Partido Aprista y acabó con el partido de Antauro.

Cambios radicales

Algunas militancias que llaman la atención son las de Lourdes Pacahuala Arroyo, por ejemplo. Según el Registro de Organizaciones Políticas, ella inició en un movimiento denominado Alianza Revolucionaria Integracionista Moralizadora. Pero algo de esa “revolución” tuvo que apagarse porque Pacahuala acabó como candidata del fujimorismo.

En el partido Victoria Nacional, de George Forsyth, hay dos ejemplos de evolución de lo regional a lo nacional. El candidato John Chávez Vilcapoma era un fiel seguidor del hoy congresista César Combina y militó en su movimiento Combina Junín. Pero cuando la ilusión se acabó Chávez no dudó en buscar un partido igual de improvisado. Raimundo Flores Caso, candidato del mismo partido, tiene una historia similar. Estuvo en Caminemos Juntos por Junín, movimiento regional de Dimas Aliaga, pero se metió al partido de la campana.

Extoledistas

Si Perú Posible, el partido que llevó a Alejandro Toledo a la presidencia, convocara nuevamente a sus ex militantes, su lista sería un batiburrillo de colores. Reymundo de Juntos por el Perú, Samaniego de Frente Amplio, Ventura de Renacimiento Unido Nacional, Carmela Velásquez de Alianza para el Progreso, Mario Pacheco de Unión por el Perú, Teresita Solano de Podemos son algunos ex militantes del partido de la chacana que están tentando el poder desde otros grupos.

Queda claro cuando el partido, la militancia y hasta la ideología son elementos accesorios en una campaña electoral. Si hay chance de una curul, no importa postular con el partido del diablo.