El caudal del río Chico, que atraviesa tres distritos de la provincia de Chincha sigue en aumento. Los agricultores de la zona de San Antonio de Salas, en el distrito de Chincha Baja, temen que se presenten desbordes y están invocando a las autoridades que se intervenga en el área crítica para contener el desmorone del borde ribero, antes de que sus cultivos de cítricos y maíz terminen inundados.
Hasta ayer se podía notar que el agua había salido de su curso. Una parte iba por el centro y otros torrentes se perdían por la izquierda y derecha. Todos con dirección a desembocar en el mar. El impacto que tenían con la ribera cada vez iba debilitando el área y provocaba que las piedras y tierra cedan y terminen formando parte de la masa que era arrastrada por el caudal de este río, que nace en la cuenca San Juan.
El terreno más cercano y vulnerable al torrente se encuentra a una distancia aproximada de 5 metros. Se trata de cultivos de cítricos que podrían resultar afectados en un eventual desborde. Otro sembrío en riesgo es de maíz. Los agricultores han intentado hacer frente a la fuerza de la naturaleza para poner en resguardo su inversión, pero poco consiguieron ante el aumento que registra el río.
Uno de los hombres de campo indica que tuvo que contratar el servicio de una maquinaria pesada para reforzar el área crítica. Pagó, con el dinero que consigue de la venta de sus productos, la suma de 200 soles por cada hora de trabajo. El esfuerzo por cuidar su cultivo se perdió con el caudal. Situación similar le pasó a otro agrónomo de la zona que destino sus recursos para reforzar la ribera.
Los agricultores solicitan a las autoridades destinar una maquinaria que permita reforzar la defensa ribereña en los puntos críticos y además de regresar el agua a su curso para evitar desbordes que podrían generar pérdidas económicas.