Manuel Pérez Rojas pudo salvarse de la justicia popular, pero no del sistema de justicia. A este hombre de 68 años, acusado por la presunta comisión de actos libidinosos en agravio de una menor de ocho años, se le impuso nueve meses de prisión preventiva y en consecuencia fue derivado al establecimiento penitenciario en donde estará encerrado hasta que se instale el juicio oral y se dictamine su sentencia.
Prisión para investigado
De acuerdo con las investigaciones el sexagenario engañó a la niña para que ingrese a su vivienda, ubicada en el asentamiento humano Fe y Esperanza del distrito de Chincha Baja. En el lugar la sentó en su rodilla y la beso a la fuerza. Este le decía a la menor que lo acompañe a la cama para hacerle “cariñitos”. La víctima pudo escapar de este encierro y encontró refugio en los vecinos y en la policía que detuvieron al acusado.
El fiscal Saul Vargas del segundo despacho de la Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Chincha al tener la declaración de la parte agraviada y ante el silencio de Pérez Rojas, solicitó al Poder Judicial nueve meses de prisión preventiva. El caso fue visto el sábado último en el Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria a cargo de la juez Rosa Sánchez Santisteban.
Al encontrarse elementos que sustentan la medida se resolvió enviar a prisión al acusado por el plazo antes indicado. El sexagenario bajo custodia policial fue trasladado al centro penitenciario de la ciudad. Desde este lugar seguirá afrontando la investigación que se sigue en su contra por haber forzado a la menor que consiguió librarse para contar la pesadilla que vivió en la vivienda de su atacante.