Hoy, la masiva población iqueña llegó hasta el templo sagrado del Señor de Luren en la provincia de Ica, donde participaron de la tradicional bajada previo al inicio del recorrido procesional que tendrá una duración por más de 16 horas. Cientos pidieron por salud, trabajo, paz y el cese de la violencia y la criminalidad en el Perú.
Fe y devoción
A las 7:00 de la mañana el Cristo crucificado fue descendido con sogas por la Hermandad del Señor Crucificado de Luren. En el interior de la iglesia se encontraban la población que había madrugado y hecho fila por más de 10 horas, cientos aplaudían y se arrodillaban demostrando su fervor religioso al santo patrono iqueño. También estuvo presente la Policía Nacional, quienes brindaron el resguardó a la imagen sagrada y las joyas de oro que portaba.
La población entre lágrimas alzaba sus manos en señal de recibir la bendición y con el acompañamiento de la banda de músicos, la imagen sagrada fue cargado en hombros hasta la parte baja de su iglesia. Esta vez se decidió no trasladarlo hasta el patio central en los exteriores de la iglesia, para que se pueda adelantar el ingreso de los fieles.
Los devotos ingresaron con cuadros, imágenes, objetos religiosos, réplicas del Señor de Luren, romeros, algodón y otros para que puedan ser bendecidos por la imagen sagrada. Los feligreses tuvieron acceso al interior del templo hasta el mediodía, luego el Cristo moreno fue trasladado a su anda procesional para el inició de su primera procesión.