Hasta 45 mil ciudadanos llegaron ayer al cementerio general de Saraja por el Día de Todos Los Santos. El presidente de la Beneficencia de Ica, Carlos Ramos, informó que los visitantes llevaron flores, cuadro con fotografías de sus seres queridos, adornos y otros.
Rezos y bailes
Asimismo, estuvo prohibido el ingreso de recipientes con agua como medida de prevención contra el dengue, y se optó por la arena húmeda. Los visitantes recordaron a sus familiares que ya no están en el plano terrenal con cánticos y los músicos acompañaban los rezos y temas de vals, canciones criollas, huaynos y otros.
El populoso camposanto iqueño alberga hasta 100 mil nichos, y la distribución se estima en 30 pabellones en el cementerio antiguo y 70 pabellones en el nuevo, por cada pabellón ingresan mil difuntos, que fueron visitados por familiares y amigos, asimismo las personas fallecidas que se encuentran en tumbas, mausoleos y fosas comunes. En el cementerio se pudo observar que uno de los pabellones donde las familias expresaban mayor sentimiento era el de San Marcos, donde descansan los restos de las primeras víctimas mortales de la COVID-19.