Desde hace cuatro años ejercían presión en sus víctimas para exigirles el pago de cuantiosas sumas de dinero como concepto de “cupo”, en La Libertad, a fin de no atentar contra sus vidas y propiedades, pero la Policía Nacional del Perú y el Ministerio Público pusieron fin a todo su accionar delictivo.
Tras seis meses de investigación exhaustiva, 320 policías junto a 32 miembros de la Fiscalía Especializada contra la Criminalidad Organizada (Fecor) desarticularon, en un megaoperativo realizado la madrugada de ayer, a 21 integrantes de la organización criminal “Los Ángeles Negros”, cuyo punto de acción era la provincia de Chepén y Pacasmayo. Cabe indicar que dentro de los detenidos se encuentran dos suboficiales de tercera de la Policía, que laboraban en la dependencia de Chepén, así como dos abogados y un asistente judicial, quienes eran el brazo legal de la red criminal.
DETALLES. De acuerdo con la información emitida por el ministro del Interior, Carlos Basombrío Iglesias, este es el décimo operativo que se ejecuta en lo que va de su gestión en la región La Libertad y los potenciales “clientes” de los miembros de esta organización eran transportistas, comerciantes y personas naturales.
“Hemos iniciado el décimo megaoperativo en La Libertad y esta vez desarticulamos a una organización criminal que tenía como centro de acción la zona de Chepén en delitos como la extorsión, robo agravado y asesinato por encargo, pero principalmente se dedicaban a extorsionar a transportistas, comerciantes y a personas naturales”, señaló.
Por su parte, el viceministro de Orden Interno, Rubén Vargas Céspedes, informó que esta agrupación operaba desde el 2013 de manera impune, por lo que fue necesario infiltrar a miembros de la Policía en esta red criminal para poder conocer todos sus movimientos y lograr su captura.
“Hemos ejecutado una labor de inteligencia desde febrero de este año con trabajos de investigación, no solo de vigilancia y seguimiento, sino también en la infiltración de agentes al interior de esta organización. Hemos hecho uso de tecnologías modernas que tenemos en el sector Interior y que se han desarrollado de manera exitosa”, precisó.
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LUGARTENIENTE. En tanto, el jefe de la Macro Región Policial La Libertad-Áncash, general PNP TitoPérez Arrascue, manifestó que la organización criminal estaba liderada por tres cabecillas que se encuentran internos en el penal Castro Castro, El Milagro y La Capilla. La lugarteniente es una joven de 22 años que ha sido identificada como Mauricia Pilar Huamanta Longa, alias “Lulu” o “Pilar” y quien, según el general, era la encargada de coordinar todas los actos delictivos.
Además, detalló que la organización criminal amasaba S/ 540,000 al año producto de las extorsiones, y que al menos habrían participado en cuatro asesinatos por ajuste de cuentas.
POLICÍAS. Dos suboficiales de tercera identificados como Miguel Ángel Soberón Correa, alias “Miguel”, y Willy Alfonso Vásquez Navarro, alias “Willy”, también fueron intervenidos con esta organización. Ellos colaboraban con la red criminal brindando información sobre los operativos y otras acciones policiales a realizarse. Ambos prestaban servicios en la dependencia policial de Chepén y ahora tendrán que dar cuenta por su participación en los presuntos delitos criminales de los que se les acusa.
ABOGADOS. Ahora bien, tal parece que la corrupción no solo se ha inmiscuido en la Policía, sino también en la administración de justicia. Y es que dos abogados y un secretario del Poder Judicial también han sido detenidos junto a los demás miembros de la agrupación.
Se trata de los abogados Dinner Seul Vásquez Flores, alias “doctor Dinner”, y Víctor Aurelio Marchena Gamarra, alias “doctor Marchena”, así como Daniel Eduardo Amaya Cabanillas, alias “doctor Amaya”, quien se desempeñaba como auxiliar en el Poder Judicial.
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El megaoperativo se realizó en Guadalupe, Lima, Lambayeque, Chepén, Chiclayo, Pacasmayo y Huanchaco, donde se procedió a la detención de los mencionados, así como el allanamiento de 29 inmuebles, la incautación de documentos, bienes, dinero, armas de fuego, municiones, droga, equipos telefónicos, dispositivos de almacenamiento y otros que servirán como elementos de convicción para la denuncia.
También se hizo el registro y requisa en las celdas de cinco reos recluidos en los establecimientos penitenciarios de Piedras Gordas, Castro Castro, Juliaca y El Milagro.
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