Las restricciones que traería consigo una tercera ola del nuevo coronavirus (Covid-19) ha puesto en alerta a los diferentes actores económicos de La Libertad. Por ejemplo, desde la Asociación de Gimnasios de La Libertad sienten que es una amenaza el lento proceso de reactivación que están teniendo, tras la segunda ola de esta letal enfermedad.
Alex Esteves, presidente de la referida asociación, aseguró que más de 45 gimnasios cerraron desde la primera ola del Covid-19.
“Lo tomamos como una fuerte amenaza a la continuidad normal de la reactivación económica que estamos teniendo ahora, si bien no hemos llegado a tener la reactivación que queríamos, por lo menos, aunque sea, estamos trabajando. Fuimos el último sector en reactivarse, empezamos con un 20% de aforo y estamos actualmente a un 50%, pero tenemos deudas que pagar y necesitamos que esto no se interrumpa”, indicó.
En ese contexto, el temor es que los clientes empiecen a abandonar esta actividad deportiva, debido a que durante la emergencia sanitaria los gimnasios fueron de los locales obligados a cerrar cada vez que el pico de contagios o muertes se mantenía en ascenso. Sin embargo, la Asociación de Gimnasios de La Libertad considera que el Gobierno debería tener en cuenta que el servicio que brindan está relacionado directamente con la salud.
“Lo que pasa es que nosotros sentimos que hay otros sectores económicos que han sido favorecidos, los centros comerciales y lugares de amplio esparcimiento, porque ellos generan mucho más PBI para el Estado que nosotros, entonces el Estado se preocupa más por ellos. Nosotros los gimnasios somos empresarios peruanos que estamos tratando de hacer lo posible por respetar las medidas de bioseguridad, creemos que se nos tiene que tomar en cuenta, sobre todo porque brindamos un servicio de salud y podemos controlar a un determinado conjunto de clientes”, agregó.
Los empresarios de este sector esperan que el presidente Pedro Castillo cumpla con atender esta demanda.