El Ejecutivo decretó que del 1 al 4 de abril (celebraciones por Semana Santa) haya inmovilización obligatoria para mitigar los decesos y contagios por el coronavirus, pero poco o nada les importó a una parte de la población (en su mayoría jóvenes), que decidieron desobedecer y acudieron a locales nocturnos e incluso decidieron ir a acampar a playas que están en localidades cercanas a la provincia de Trujillo.
De rompe y raja
La noche del último miércoles, la Policía Nacional, en coordinación con el Ejército Peruano y personal de seguridad ciudadana de los diferentes distritos, realizaron diversos operativos e intervinieron a más de 60 personas que incumplieron con el toque de queda.
A las 10:40 de la noche, en pleno centro histórico, la Policía intervino el local “La Vieja Taberna”, ubicada en la tercera cuadra del jirón Ayacucho, donde encontró a 30 personas, entre varones y mujeres, que tomaban licor, estaban sin mascarillas y no respetaban el distanciamiento social.
Mientras que en la bodega “Don Beto”, situada en la avenida Costa Rica, en la urbanización Monserrate, encontraron a 33 ciudadanos que celebraban un cumpleaños y bebían cerveza hasta en la vía pública.
Por otro lado, muchos trujillanos decidieron irse más al norte de la ciudad y acampar en algunas playas, pero fueron intervenidos por la Policía y el Ejército Peruano.