La oficina de la Defensoría del Pueblo en La Libertad requirió a la Policía Nacional del Perú que refuerce los controles en el tránsito de vehículos en las zonas costeras de la región, sobre todo en el balneario de Huanchaco, dado que, tras la celebración de las Fiestas Patrias y el cambio de nivel “alto” a “moderado” en la jurisdicción, se ha evidenciado gran afluencia de público, que en muchos casos no respeta los protocolos de seguridad y podría conllevar a la propagación de una tercera ola de COVID-19, en forma más agresiva.
Advirtió que en los últimos días en la región se ha podido observar la normalización de las reuniones sociales, la aglomeración de ciudadanos en las playas e, incluso, la realización de conciertos en locales en forma clandestina. Asimismo, hay gran presencia de personas en las calles y todas esas situaciones representan un serio riesgo para la salud pública, pues, pese a la vacunación, aún está vigente la alerta por el virus.
“Los últimos fines de semana hemos advertido gran afluencia de vehículos y, por ende, muchas personas en las playas, generando caos y sin control de la Policía de Tránsito. La concentración de personas no solo está en las playas, sino también en los centros comerciales, centros recreacionales y en otros espacios, en los que las visitas han aumentado en forma abrupta, pero debemos seguir en alerta frente a la tercera ola de la pandemia”, refirió José Agüero, jefe de la oficina defensorial de La Libertad.
Dado que la población no acata las recomendaciones de continuar respetando las medidas de seguridad y control del virus, la institución exhortó a la Policía a fortalecer los servicios de patrullaje y fiscalización en las playas, donde hay gran afluencia de personas y vehículos, sobre todo los domingos, ahora que está permitido transitar en unidades de uso particular. La Policía también debe fiscalizar que los ciudadanos solo salgan de sus viviendas para realizar actividades estrictamente necesarias, tal como al inicio de la pandemia.