Mayoría en el Congreso rechaza la renuncia de PPK

El Congreso de la República inició ayer a las cuatro de la tarde el debate sobre la renuncia a la presidencia de Pedro Pablo Kuczynski. Sin embargo, la votación sobre si se acepta o no recién se da hoy, informó el presidente del Parlamento, Luis Galarreta.

Mientras por un lado el congresista aprista Jorge del Castillo pedía aceptar la renuncia de Kuczynski, por el otro, en la tienda fujimorista, Luz Salgado expuso los motivos por lo que su bancada rechazaba los términos en que el saliente presidente dejaba el puesto que ganó en las elecciones de 2016.

Quien de manera inesperada tomó la palabra fue el legislador Moisés Mamani, el artífice de las grabaciones donde se ofertaban las obras públicas a cambio de su voto contra la vacancia de Kuczynski.

“La población, esa gente de a pie, ya no confía en nosotros. ¿Cómo vamos nosotros a demostrarle la confianza, si desde el Ejecutivo rompen la mano a cambio de votos?”, cuestionó el puneño.

EL DEBATE. A su turno, Gino Costa, el parlamentario que renunció a la bancada de PPK tras el indulto a Alberto Fujimori, señaló que desde el Legislativo han respaldado los pedidos gubernamentales, pero se mostró contra los detalles de la carta de renuncia de Pedro Pablo Kuczynski.

Al respecto, comentó que el Parlamento ha aprobado dos presupuestos generales y no ha habido buena inversión.

De igual manera, recordó, aceptaron el plan de reconstrucción y su respectiva inversión, así como la licencia para legislar a favor del Gobierno Central.

“Estamos de acuerdo en aceptar ese pedido que nos hacen (la renuncia), pero ese pedido debe ser modificado en su consideración. Eso tenemos que ver, qué consideraciones deben ser cambiadas”, indicó, en una muestra de rechazo a la carta de Pedro Pablo Kuczynski.

Por su parte, el parlamentario naranja Octavio Salazar sostuvo que es el momento de cambiar la historia.

“Esperemos que el nuevo mandatario, el señor Vizcarra, respetando la sucesión reconocida en la Constitución, esté a la altura del gran reto de dirigir a una Nación como la nuestra”, precisó.

Manuel Dammert, de Nuevo Perú, fustigó a Pedro Pablo Kuczynski y señaló que el renunciante presidente quiere desviar la atención e impedir la vacancia por su responsabilidad en el caso Odebrecht.

Por tal motivo, comenzó a enumerar los posibles delitos del mandatario en el uso de su empresa Westfield Capital con Odebrecht.

“En la Junta de Portavoces había que aceptar la renuncia, pero no con sus fundamentos, sino con lo que tiene el Congreso”, sugirió en referencia a su cuestionamiento por ser presunto “lobista”. “No lo vamos a aceptar con lo que dice en su carta”, acotó.

Minutos después, el legislador Marco Arana resaltó que el país no quiere ningún presidente corrupto más. “Sabemos que la corrupción está enquistada en el poder”, expresó.

“Nosotros planteamos que si la mayoría de este Congreso no se dedica a fortalecer el sistema de justicia, esto no va a cambiar”, especificó el miembro del Frente Amplio.

Maritza García, de los Avengers de Kenji Fujimori, se dirigió a Mamani, a quien acusó de ser partícipe de una emboscada y le pidió que también se disculpe por eso.

Asimismo, se mostró a favor de aceptar la renuncia de PPK. “Es momento de salir de esta crisis política (...) no sigamos debatiendo sobre una posible vacancia presidencial”, declaró.

Marisa Glave, de Nuevo Perú, no perdió el tiempo y disparó: “El señor Kuczynski no se va porque sea una víctima, porque sea un pobrecito, sino porque seguía en curso un proceso de vacancia”.

Además, mencionó que, tras el indulto a Alberto Fujimori, PPK debe dirigirse a las víctimas de La Cantuta y Barrios Altos.

“El señor no ha tenido la decencia de pedir perdón (...) El señor (PPK) debe ser vacado”, añadió.

María Foronda, del Frente Amplio, recalcó que la carta de renuncia debe consentir los motivos de la moción de la segunda vacancia.

El más enfático fue Mauricio Mulder, del partido aprista, quien exigió que los parlamentarios Guillermo Bocángel y Bienvenido Ramírez salgan del Hemiciclo para poder seguir el debate.

A contraparte, su compañero Elías Rodríguez solicitó una concertación nacional para salir de esta coyuntura y aceptar la renuncia del presidente.

EN SUS MANOS. Eventualmente, el Congreso podría rechazar la renuncia de Kuczynski y optar por destituirlo, tal como hizo con Alberto Fujimori (1990-2000), quien envió una carta de dimisión por fax desde Japón acusado por los escándalos de corrupción y la compra de legisladores.

Pedro Pablo Kuczynski es el primer presidente que pierde su puesto por el torbellino Odebrecht, que salpica a otros exmandatarios peruanos como Ollanta Humala, en prisión preventiva desde hace ocho meses junto a su esposa Nadine Heredia, o Alejandro Toledo (2001-2005), sobre el que pesa una orden de extradición desde los Estados Unidos.

En diciembre, Kuczynski sobrevivió a un intento de destitución gracias al sorpresivo apoyo de una decena de legisladores opositores encabezados por Kenji Fujimori, el hijo menor de Alberto Fujimori, a cambio del indulto que sacó al exmandatario de la cárcel, donde cumplía una condena de 25 años por corrupción y crímenes contra la humanidad.

El vicepresidente y actual embajador de Perú en Canadá, Martín Vizcarra, tiene previsto llegar en la madrugada de hoy (antes de la 1 a.m.) a Lima para asumir la presidencia hasta julio de 2021.

Luego, la Junta a Portavoces del Congreso acordará investir al nuevo presidente, en un protocolo similar al usado el 28 de julio de 2016.

Se notificará la decisión a los órganos pertinentes del Estado y se procederá a publicar la resolución en la página web del Congreso.

En seguida, se invitará a Vizcarra a asumir el cargo. Luis Galarreta portará por unos minutos la banda presidencial, tomará juramento y entregará la misma.

El nuevo jefe de Estado dará un discurso en el Hemiciclo.

Según informó El Comercio, Vizcarra adelantó que en diez días tendrá listo su gabinete ministerial.

Previo a su arribo, vía Twitter, el virtual mandatario se había pronunciado sobre la coyuntura.

“Tengo la convicción que juntos demostraremos una vez más que podemos salir adelante”, escribió Vizcarra, que ayer cumplió 55 años y al que le aguarda una labor titánica al carecer de partido político en un Congreso dominado por Fuerza Popular, el partido de Keiko Fujimori.

“Se dice que cambiarán las cosas, pero soy pesimista (...). Hay que cambiar la política, las reglas de financiamiento de los partidos políticos para que esto no vuelva a ocurrir”, opinó Gaspard Estrada, director del Observatorio Político de América Latina y del Caribe (OPALC) de la Universidad de Ciencias Políticas de París.