Los embates de la naturaleza siguen pasándole factura a cientos de familias que viven cerca de las principales playas de Trujillo.

Esta vez, los balnearios de Buenos Aires, Las Delicias y Huanchaco fueron los más perjudicados debido al avance registrado en las últimas semanas por los oleajes anómalos, sumado a la erosión costera que amenaza con seguir afectando el litoral liberteño. Aquí algunos testimonios de las familias damnificadas.

TESTIMONIOS. Nélida Dionisio Silva tiene 35 años, vive en el balneario de Buenos Aires hace más de 12 años, junto a su esposo y sus tres hijos de 12, 7 y 3 años. Ellos lo han perdido todo.

“Los oleajes empezaron en la madrugada, pero el más fuerte se suscitó a las 4:00 de la mañana. Fue de terror. En un momento pensé que moriríamos. Tuve que evacuar con mis hijos a la casa de una vecina. Toda mi casa es de adobe y no soportó la furia del mar. Yo vivía en la parte trasera de la casa de mi mamá”, relató.

“Habilité una pequeña salita, mi cocina, mi comedor y mi habitación. El mar me arrebató todo”, acotó.

Por su parte, Ana María Sánchez Cavero mostró su indignación debido a la desatención de las autoridades del distrito.

“El alcalde brilla por su ausencia. Estamos indignados con él. No sabemos cómo ha ganado ese señor. Yo he perdido toda mi casa y ahora estamos pidiendo una reubicación digna porque tampoco nos van a ir a botar a los cerros donde no hay luz, agua, ni otros servicios básicos. Estamos exigiendo al gobierno regional que nos dé las oportunidades, pero hasta ahora no hay nada”, enfatizó.

En tanto, Braulio Ipanaqué González lamentó la pérdida de su vivienda en la zona sur de Buenos Aires, en la que habitó por más de 15 años.

“Toda mi casa está inundada, se han caído las paredes, he perdido todos mis artefactos porque todo ha sido inundado por el agua y quedó inhabitable. La maquinaria no es suficiente. Pido que nos reubiquen, mientras tanto nos están haciendo un empadronamiento”, precisó.

La mañana de ayer, el alcalde de Víctor Larco, Carlos Vásquez Llamo, recorrió el sector Armando Villanueva de Buenos Aires Sur, donde se ubican los afectados por los oleajes anómalos suscitados en los últimos días.

El burgomaestre, constatató in situ, las condiciones en que se encuentran las familias damnificadas. Asimismo, se procedió a las labores de reempadronamiento a fin de organizar el sostenimiento de acciones a favor de la población que se encuentra a merced de los embates del mar.

Días atrás se entregó una subvención en víveres y productos no perecibles a las familias, que consiste en galletas, arroz, aceite, avena, leche, conservas de pescado, fideos, agua, lo que se suma a las colchonetas y 30 carpas instaladas en la zona por gestión edil ante el Gobierno Regional de La Libertad.

HUANCHACO.
La situación en el balneario más famoso de La Libertad, no es ajena a las consecuencias de la fuerza de la naturaleza.

Cientos de empresarios de hoteles y restaurantes han visto afectados sus negocios y por ende las ganancias han decaído en los últimos días.

El gerente regional de Comercio Exterior y Turismo, Eduardo Azabache Alvarado, informó que el flujo turístico en las playas se redujo de 70 mil turistas, a la mitad, es decir, solo 35 mil personas asistieron a los balnearios de la región.

“Dada la alerta roja que se generó para pescadores y bañistas entendemos que el flujo para las playas se ha reducido de los 70 mil que suelen ir los fines de semana a la mitad. Esto es estacional ya no hay más oleaje anómalo, pero nos preocupa el fenómeno de El Niño y los efectos que pueda tener la naturaleza respecto a la erosión costera”, enfatizó.

El alcalde distrital de Huanchaco, José Ruíz Vega, indicó que las pérdidas económicas para los negocios ascienden a los 30 mil soles diarios y que unos 100 negocios se han visto perjudicados en la zona.

Según el presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes y Afines (Ahora) de La Libertad, Alcides Goicochea, son cerca de 200 negocios turísticos, a lo largo del litoral regional, que han sido afectados.

Señaló que las autoridades ediles no han propuesto una solución seria a esta problemática. “Lo que han hecho, con enrocados o bloques de sacos de arena, es solo tratar de mitigar el efecto, mas no solucionarlo”, observó.

Mientras tanto, la municipalidad de Huanchaco continúa con el arenado en las zonas de Los Tumbos y El Boquerón, para prevenir futuros daños causados por el oleaje, acción fue pedida y respaldada por los comités de la población afectada.

Recientemente, presentó un proyecto para la elaboración de un malecón turístico en el mencionado balneario.

ACCIONES. El gobierno regional ha destinado maquinaria para el reforzamiento del enrocado. En total son 8 máquinas entre escabadoras, volquetes y cargadores frontales que trabajarán a lo largo de 2 kilómetros.

Para Huanchaco se han destinado 30 volquetadas de arena, para evitar que el mar siga avanzando y afectando a más familias en la zona.

Hace poco 300 metros del enrocado de Buenos Aires cedieron ante la fuerza del mar.