La gestión del alcalde provincial de Chiclayo, Marcos Gasco Arrobas decidió salir a responder por los innumerables cuestionamientos a la compra de 14 compactadoras, valorizadas en más de S/8 millones.

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Además de negar las observaciones que presentó uno de los consorcios que participó en la licitación, las declaraciones de los funcionarios confirmaron que aún no se revisa aspectos importantes de esta adquisición.

Responden

En conferencia de prensa, el subgerente de Logística y Control Patrimonial, Carlos Enrique Montalvo Calderón, desestimó las irregularidades que denunció en noviembre pasado el Consorcio Coinpro.

Para el funcionario, este postor recurrió a una “práctica” que utilizan las empresas cuando pierden una licitación pública. “No estamos ante una denuncia ciudadana y legítima, sino ante un particular que tiene su propio interés porque no se le dio la buena pro”, dijo.

Además, mencionó que el Consorcio Coinpro no presentó observaciones ante el Tribunal de Osce (Organismo Supervisor de Contrataciones del Estado) ni pagó la garantía de 3% para imponer un recurso de apelación luego de darse la buena pro.

“Los postores tenían la oportunidad de cuestionar legítimamente si no estaban de acuerdo (con la licitación) ante las instancias correspondientes pero eso no ocurrió”, sostuvo.

En cuanto al material que usará la empresa ganadora (Consorcio Equipos y Soluciones Ambientales Perú) para los componentes de la compactadora, el subgerente insistió en que el acero F24 sí es similar al acero estructural ASTM A-36 que se solicitó en las bases.

“Para el comité de selección, la plancha de acero F24 tiene características similares. Similar no significa igual, pero eso ya es una cuestión técnico que lo podría resolver la Contraloría”, agregó.

Cuando volvimos a consultar si se realizó una homologación entre ambas normas (F24 y ASTM A-36), Montalvo refirió “que esa disposición técnica va a ser absuelta en su momento” ante la Contraloría.

“Ese cuestionamiento ya ha llegado al Órgano de Control Interno (del municipio)”, indicó el funcionario, tras negarse a darnos más detalles.

Pese a nuestras interrogantes, el municipio insistió que durante el proceso de licitación no hubo ningún cuestionamiento ante los órganos correspondientes (OSCE y Contraloría), y por lo tanto, están convencidos de “que las cosas se han hecho bien”.

En otro momento, también negaron que exista una sobrevaloración, tal como lo señaló el Consorcio Coinpro en su denuncia, pues afirman que la oferta de la empresa ganadora es inferior al valor que estimó inicialmente la municipalidad.

Por definir

En un informe previo, Correo señaló -en base a fuentes que conocen este caso- que las características de estas nuevas compactadoras podrían ocasionar un menor rendimiento, así como la ruptura de telescópicos y mangueras hidráulicas, y mayor consumo de combustible.

Al ser consultado por esto, el subgerente no pudo precisar cuál es el tiempo de vida útil que se ha estimado para esta nueva maquinaria.

Incluso, adujeron que se cuenta con una garantía de 1 año si es que ocurren fallas técnicas en los vehículos.

Otro factor que resulta preocupante es que la Municipalidad Provincial de Chiclayo no ha concluido el plan de operatividad y mantenimiento para las compactadoras, pese a que el alcalde ofreció enviarlo a los regidores Percy Espinoza y Karina Villegas.

A eso se suma que tampoco han visitado el almacén ubicado en Lima donde se ensamblarán las compactadoras con el chazis, a fin de verificar la calidad de lo ofertado por el Consorcio ganador.

Cabe recordar que, de acuerdo a las bases de la licitación, el municipio asignará a un especialista para comprobar los procesos y materiales usados en la fabricación de la compactadora.

Según la entidad, este proceso no se ha podido realizar porque las compactadoras aún no han arribado al país -desde Argentina- pero el plazo para cumplir con ello vence el 26 de febrero.