La alcaldesa de Chiclayo, Janet Cubas Carranza, renunció a su afiliación política al partido Juntos por el Perú (JP), agrupación con la cual postuló en las Elecciones Municipales y Regionales 2022.
Según documentos que se difundieron ayer, Cubas realizó el trámite el viernes 12 de julio ante la Oficina Desconcentrada del Jurado Nacional de Elecciones (JNE).
En este momento, la alcaldesa ya no cuenta con partido político.
Por el contrario, el dirigente de JP, Nilo Guamuro Altamirano, afirmó que la autoridad fue expulsada de la referida agrupación política, debido a que no ha cumplido con implementar sus promesas de campaña para mejorar las condiciones de Chiclayo en cuanto a transitablidad, limpieza pública, orden, ornato y seguridad.
Pero el malestar en la organización ya se veía venir y Cubas habría sido la primera en advertir este final.
Como ya se detalló, ella acudió al JNE la semana pasada, y JP emitió un comunicado sobre el tema recién el domingo 14 de julio.
Ahí también precisan que, en todo este tiempo, la alcaldesa “ha manifestado una actitud personalista y que abandonó el programa del partido evadiendo sus responsabilidades, y mostrando desconocimiento, ineficiencia y escaso liderazgo para sacar adelante a Chiclayo”.
También exhortan a Cubas concentrarse en los problemas de la municipalidad y “no distraerse en nuevas aventuras electorales”.
La verdad es que el plano político no le sonríe a la burgomaestre, pues a su impopularidad se añade el proceso de recolección de firmas para impulsar su revocatoria del cargo.
Días atrás el decano del Colegio de Ingenieros del Perú (CIP) en Lambayeque, Carlos Burgos Montenegro, hizo un llamado para que la alcaldesa se enfoque en las situaciones más urgentes de la Capital de la Amistad, pues no se ven resultados, a pesar de que ella va en su segundo periodo al frente del municipio.
Cabe indicar que antes de integrar el partido Juntos por el Perú, Cubas formó parte de Acción Popular (AP), entre los años 2010 y 2017.
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