Imagen
Imagen

Siguen los cambios y controversias en el sonado caso “Los Wachiturros” o también conocido como el caso Tumán en la ciudad de , en el que se investiga al empresario azucarero  Pichotito, por asociación ilícita para delinquir.

CARPETA. Tal como lo informó Correo, a partir del último 01 de noviembre, el fiscal Sergio Lucio Zapata Orozco, fue separado de la coordinación de la Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de .

La justificación que dieron los fiscales superiores, quienes tomaron la decisión, fue que Zapata se dedicaría de manera exclusiva a los casos emblemáticos que tenía, como el de “Los Limpios de la Corrupción” y “Los Wachiturros”.

Sin embargo, el abogado del , José Carlos Isla Montaño, precisó a Correo que actualmente la carpeta en donde se investiga a su patrocinado la debe tener el coordinador a cargo de la fiscalía de  y no el fiscal Lucio Zapata.

“Existe una disposición interna en el Ministerio Público, que los casos emblemáticos son investigados por el fiscal coordinador, es decir en este caso ya no debería tenerlo el magistrado Zapata sino el fiscal Javier Quiroz Grosso”, recalcó el letrado.

Señaló que desde un inicio el caso en donde se le investiga como autor mediato de la organización criminal “Los Wachiturros”- Tumán, al también presidente de la Federación Peruana de Fútbol, se denominó como emblemático y es por ese motivo que se debe respetar el reglamento.

Asimismo finalizó diciendo que hasta el momento no se ha realizado ninguna diligencia con respecto a su defendido y aún siguen esperando que sea citado al Ministerio Público.

Estrategia. Fuentes de la Fiscalía de  corroboraron lo mencionado por Isla Montaño.

Señalaron que actualmente la investigación la viene realizando el fiscal coordinador, Javier Quiroz Grosso.

Además dejaron entrever que este cambio sería una estrategia para que este caso no quede en manos de Lucio Zapata ante tanta suspicacia.

Correo trató de comunicarse con la presidenta de la Junta de Fiscales, Giovanna del Río Carreño, pero no contestó nuestras llamadas.