Un individuo intenta matar a su conviviente con un fierro y además le propina varios golpes
Un individuo intenta matar a su conviviente con un fierro y además le propina varios golpes

Más casos de violencia contra la mujer se siguen registrando en la provincia de . Esta vez, una señora de 41 años fue atacada brutalmente por su pareja, quien utilizó objetos punzocortantes y, casi de milagro, no llegó a ocasionarle la muerte a la agraviada.

El hecho se registró ayer al promediar las 6:00 de la mañana en la manzana G del asentamiento humano Wilmer Fernández, en el lado oeste de Chiclayo.

ATAQUE. Tras el horror, Gladys Girón Ramos (41) logró denunciar a su pareja, Modesto Calle Vegas (43), por violencia familiar. Previamente, según narraron los testigos, ella se encontraba con su hija, Maritza Calle Girón (20), acompañándola para ir al trabajo, cuando fueron atacadas por el hombre.

La hija de la pareja dijo que sus padres habían tenido una discusión horas antes, en su vivienda, y que luego su padre, Modesto Calle Vegas, las había seguido. Ofuscada, Maritza Calle indicó que fue en ese momento que su padre golpeó a Gladys Girón con un fierro a la altura del rostro, dejándole un corte en la frente. Luego de esto, le dio varios golpes en diferentes partes del cuerpo.

Sin embargo, al notar que su hija corría a buscar ayuda, el agresor la siguió por toda la calle para retenerla y evitar que denuncie el hecho. Según precisó la joven, su progenitor llegó a amenazarla con un arma blanca (cuchillo) cuando ella trataba de huir por las chacras de arroz cercanas a su vivienda.

Poco después, agentes de Radio Patrulla que iban por el lugar fueron alertados por los vecinos y detuvieron a Modesto Calle cerca del dren de la Panamericana Norte.

EN OBSERVACIÓN. El médico de turno del Hospital Regional de Lambayeque diagnosticó a la agraviada una herida cortante en la región frontal, por lo cual ella quedó en observación por el momento.

Mientras tanto, Calle Vegas fue derivado al área de trauma shock, debido a que, según refirió su hija, Maritza Calle Girón, en un instante habría ingerido insecticida al pensar que había asesinado a su pareja.

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