El médico Carlos Salazar Banda fue dado de alta del Hospital Dos de Mayo, ubicado en el Cercado de Lima, luego de abandonar la unidad de cuidados intensivos (UCI) del citado nosocomio. Fue internado en esta unidad en dos oportunidades durante su instancia, la cual se prolongó por 12 días.
El galeno de 45 años, especialista en cabeza, cuello y maxilofacial, ingresó al hospital Dos de Mayo, refiriendo fiebre, tos, dificultad para respirar y sensación de ahogo. Había estado en cuarentena domiciliaria tras conocer su positividad a COVID-19, pero la insuficiencia respiratoria se presentó y empezó a agravarse.
Salazar, quien ejerce la profesión en el Instituto Nacional de Salud del Niño Breña, tuvo varias etapas para su recuperación, según explicó el doctor Willy Díaz, jefe del Servicio de Cuidados Intensivos del Hospital Nacional Dos de Mayo. En principio, se le proporcionó oxígeno y estuvo tres días en la UCI.
“Esos tres días pudimos compensarlo y al ver que no había requerido ventilación mecánica, lo enviamos a una cama del área de Neumología. No obstante, nuevamente empezó a recaer y la tomografía evidenciaba que el virus estaba comprometiendo ambos pulmones, entonces decidimos nuevamente regresarlo a la UCI. Allí se le colocó una cánula nasal de alto flujo y fue respondiendo favorablemente, bajo la atenta mirada del equipo médico”, relató Díaz.
“Hoy, él está tranquilo. Me cuenta que sentía que iba a morir sobre todo cuando su cuerpo no reaccionaba bien y fue llevado por segunda vez a la Unidad de Cuidados Intensivos. Felizmente, los doctores le han ayudado en un momento muy duro, muy difícil”, contó su esposa Flor Polanco Ramírez, con quien tienen tres hijos.
A la fecha, Carlos Salazar permanece en su vivienda y tiene que guardar cuarentena dos semanas más, hacer ejercicios de fisioterapia respiratoria y mantener el tratamiento con el antibiótico que se le ha indicado.