El desborde de los hospitales públicos en la capital fue alertado ayer por la Defensoría del Pueblo, que solicitó al Gobierno ampliar -en el más breve plazo- el número de camas, ambientes y el equipo médico.

Según el seguimiento diario, los nosocomios del Ministerio de Salud (Minsa) como de EsSalud están llegando al límite de la atención de pacientes con síntomas de COVID-19. Los enfermos que llegan a los hospitales Arzobispo Loayza, Cayetano Heredia, Dos de Mayo, Guillermo Almenara, Hipólito Unanue, Villa El Salvador, Voto Bernales, Luis Negreiros (Callao), entre otros, están siendo ubicados en sillas de ruedas, en carpas instaladas en los patios o cocheras, alertó.

Fuentes de la Defensoría informaron que la situación en los hospitales Guillermo Almenara y Edgardo Rebagliati es crítica para los pacientes.