Completamente cegado por los celos, Pedro Miguel Sánchez Escobar (35) estaba dispuesto a todo: matar a sus tres hijos (de 12, 8 y 4 años) y él mismo atentar contra su vida. Para eso, había encerrado a sus pequeños en su casa, ubicada en el distrito de Comas.
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Tras la confesión de la infidelidad de su esposa Lesly Jhennifer Román Correa (40), el hombre se encerró en su vivienda con sus vástagos y le exigía a la mujer volver. Ella estaba en la comisaría asentando la denuncia cuando Sánchez Escobar la llamó y volvió a amenazarla.
“Estoy en la casa. No me vas a encontrar, al menos no con vida. Me cag..., me juraste por mis hijos que no había pasado nada y me mentiste. Estoy en la casa, el último sitio donde voy a estar. Tú misma vas a poner el dedo en la pistola”, le dice Pedro Sánchez a su esposa.
“Tus hijos están acá, conmigo, tus papás también. No hagas que me vuelva loco. Me tienes que aclarar muchas cosas. Te juro por mis hijos que si no vienes vas a encontrar cuatro desgracias, te lo juro. Eso va a pesar en tu conciencia. Anda a la policía si quieres. Te doy cinco minutos, ya me volví loco”, siguió amenazando.
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