violencia contra la mujer
violencia contra la mujer

Lima es una de las 10 ciudades del mundo más peligrosas para las mujeres, según un último estudio de Thomson Reuters. Lamentablemente, lo grafican las cifras. Entre enero y el 27 de diciembre, 165 mujeres han sido asesinadas en el país por sus parejas, exparejas o acosadores, según el registro del Ministerio de la Mujer. En tanto, las tentativas de se han elevado de 304 a 385, en comparación con el 2018. Un lamentable número que sigue en aumento y nada parece frenarlo.

El perfil

De acuerdo con las cifras que maneja el , el 49% de los feminicididas tiene entre 30 y 59 años. El otro grupo de edad que cometió este crimen tiene edades que oscilan entre los 18 y 20 años.

Respecto a la situación laboral del agresor, el 57% si cuenta con alguna ocupación, mientras que un 28% no lo tiene. De igual manera, de un 15% de los victimarios no se tiene reporte.

Las regiones con más casos de feminicidio son Lima Metropolitana y Provincias, con 52 casos. Le siguen La Libertad (12), Junín (11) y Puno (9).

¿Cuál es el vínculo que existe entre la víctima y su agresor? El 49% de los victimarios es la pareja; el 19% es la expareja y un 5% algún otro familiar.

Los presos

Un informe del Observatorio de la Política Criminal del Ministerio de Justicia arrojó que el 51% de los feminicidas que purgan condena por este delito en el penal Miguel Castro Castro de Lima se sentían satisfechos con las parejas a las que asesinaron.

En una encuesta realizada a las 67 personas recluidas en el citado penal, también se evidenció que el 30% volvería a casarse con sus víctimas.

En cuanto a los reclusos, 40 de ellos aseguraron que sus padres o apoderados los violentaban o les pegaban cuando eran niños.

Otros 25 de ellos también han señalado que el principal motivo que los llevó a cometer los asesinatos fue el “impulso”, otros diez dijeron que la “venganza” y seis aseguraron que por “celos”.

Traumas del pasado

La doctora Carmen González, fundadora de la Clínica de las Emociones, señaló que los feminicidas no reconocen que la mujer es una persona con sentimientos y con capacidad de decidir.

“El cerebro emocional que siente la rabia (del feminicida) acciona sobre el cerebro reptiliano y se produce la descarga, sin posibilidad de ascender a la capa cerebral pensante para autobservarse”, explicó.

Añadió que la “impulsividad” está vinculada a vivencias del pasado. “Esa impulsividad está vinculada a vivencias sentidas por el feminicida en la primera infancia, donde puede haber visto maltrato extremo a la figura femenina o haber sido víctima de descargas impulsivas de figuras parentales. En cualquier caso, no aprendió a tolerar aquello que no coincide con sus deseos”, argumentó la especialista.

Situación del agresor

La demanda procesal en la Fiscalía impide que los asesinos de mujeres pueden ser condenados de forma rápida. Así lo demuestran las sentencias emitidas este año contra los feminicidas. En todo el año 2019, solo hay cuatro casos que han tenido sentencia por feminicidio, según un reporte de la Defensoría del Pueblo. ¿El resto?

Hay 105 feminicidas detenidos, 66 procesados con prisión preventiva, 10 con comparecencia restringida, cuatro condenados por otros delitos, dos en centros de salud (bajo custodia policial), 18 se encuentran no habidos, tres con detención preliminar, 16 se suicidaron y 33 no han sido aun identificados.

El sistema de recompensas del Ministerio del Interior tiene en sus registros a 18 hombres requisitoriados por feminicidio y a uno por tentativa, cuyas ubicaciones tienen precio por encima de los 10 mil soles para quien dé información que permita su captura.

Un total de 1,001 hombres se encuentran tras las rejas por haber cometido el delito de feminicidio en el país. ¿Por qué este delito sigue apagando la vida de las mujeres? “Las normas y las sanciones no bastan. El machismo, la falta de valores y de atención en la salud mental deben ser ejes para trabajar”, señaló a Correo la especialista de salud mental Helga Ruiz.