Más de 300 personas procedentes de San Martín continúan firmes en su decisión de retornar a esa región ante la orden inmovilización durante el estado de emergencia por la pandemia del coronavirus.
Por tercera vez consecutiva, pasarán la noche en la autopista Ramiro Prialé sobre el asfalto y en medio de las bajas temperaturas en la madrugada.
Correo verificó que se trata de adultos mayores y menores de edad con sus padres. Los niños están acostados sobre mantas y colchas, mientras que sus progenitores permanecen sentados. Igualmente, otros se han acomodado para pernoctar en la vía.
La tarde de este domingo, estas personas recibieron alimentos y bebidas. Para ello, formaron largas colas y de forma ordenada accedieron al plato.
Previamente, hicieron un alto en un parque aledaño a la vía donde aprovecharon para asearse y lavar sus ropas.
La mayoría de los varados en Lima dejaron de trabajar a consecuencia del COVID-19 y fueron desalojados de sus viviendas al quedarse sin dinero para cancelar las pensiones.
Los miembros de la Policía Nacional resguardan la caminata de esa gran cantidad de compatriotas con sus maletas, mochilas y bolsas en manos.