El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Perú lanzó este jueves una campaña para prevenir a los padres sobre los peligros que supone que sus hijos participen en retos virales, en relación a su salud y seguridad.
”Estos desafíos o pruebas populares en las redes sociales que utilizan niñas, niños y adolescentes ponen en peligro la integridad física o psicológica del menor de edad”, señaló la campaña compartida por dicho ministerio en su cuenta de Twitter, junto a una serie de consejos.
Recomendó a los padres preguntar a sus hijos a quiénes siguen y con quiénes interactúan en redes sociales, y hablarles sobre la importancia de configurar las redes sociales en modo privado.
En este sentido, aconsejan que los progenitores les expliquen cómo crear contraseñas seguras y educar los menores sobre la importancia de proteger sus datos personales.
Sobre los retos virales en sí, piden que transmitan a sus hijos de la importancia de no reenviarlos y romper la cadena.
Además, sugiere a los padres usar herramientas de control parental para menores en internet y por si estos tienen dudas, el ministerio habilitó una dirección de correo para que manden sus consultas en la materia.
El miércoles, falleció en Lima una niña de 11 años que había ingerido un psicotrópico, benzodiazepina, mientras estaba en su colegio.
Este caso consternó al país e hizo saltar las alarmas sobre los retos virales que menores reproducen, porque medios locales apuntan a que la menor fallecida tomó el medicamento como parte de uno de estos.
El Hospital Nacional Cayetano Heredia confirmó “el fallecimiento de la paciente de iniciales G.T.M. (11), quien ingresó al establecimiento de salud el día lunes 29 de mayo y estaba recibiendo atención especializada en la Unidad de Emergencia Pediátrica, por su condición crítica de salud”, señaló la información difundida por la institución sanitaria.
Indicó que la causa de la muerte fue una encefalopatía multifactorial, hemorragia cerebral masiva e hipertensión intracraneal.
La defensa de la familia de la niña, Mario Arribas, afirmó a la prensa que la menor tomó benzodiazepina mientras estaba en el colegio, y pidió las imágenes de seguridad de la institución educativa para saber la verdad de lo que pasó.
Este medicamento, que necesita receta para ser adquirido, provoca efectos sedantes, hipnóticos, ansiolíticos, antiepilépticos, amnésicos y miorrelajantes, y se desconoce cómo la menor tuvo acceso a este.
El abogado comentó que va a acusar al colegio Imperio del Tahuantinsuyo por el delito de homicidio culposo, “por inobservancia en la regla de trabajo y profesión”.
Fuente: EFE