Municipio de Comas destruyó por fin el mausoleo senderista (VIDEO Y FOTOS)
Municipio de Comas destruyó por fin el mausoleo senderista (VIDEO Y FOTOS)

Alrededor de dos horas tardaron las máquinas excavadoras en demoler el  ubicado en el cementerio Mártires 19 de Julio, en Comas. La construcción albergaba los restos de ocho senderistas muertos en el motín de El Frontón en 1986, los cuales finalmente fueron trasladados a distintos nichos del camposanto con sus nombres.

La existencia de la edificación, considerada una afrenta para el país y las víctimas del terrorismo, fue revelada por Correo y desató una ola de indignación nacional.

, alcalde del distrito y quien encabezó la labor de demolición, indicó que el trabajo fue bastante hermético. “Es un tema de cumplimiento de funciones, que manda la ley. Nosotros hemos cumplido el procedimiento a cabalidad”, expresó la autoridad edil.

En ese sentido, explicó que los familiares fueron notificados con anticipación. “Hemos obtenido los permisos de exhumación (...). Antes no podíamos solicitarlo”, dijo.

Sin embargo, en la planta baja del cementerio, un grupo de personas y familiares de los senderistas enterrados protestaron con carteles.

“Tenían que habernos notificado. Ya no hay respeto al Poder Judicial, ¿cómo el fiscal puede ir contra el sistema judicial?”, se preguntaron.

RECUENTO

El 23 de setiembre del 2016, Correo denunció en su portada: “SL glorifica a sus muertos en mausoleo”, dando cuenta de un revelador video filmado por agentes de la Policía Nacional, en la que Sendero Luminoso (SL) rendía culto a sus muertos en un mausoleo levantado en el cementerio de Comas.

Las imágenes eran del 19 de junio de ese mismo año y al menos unas 200 personas marchaban por las principales avenidas con numerosas pancartas rojiamarillas y con los rostros de los presuntos “presos políticos”. Además, se vio a jóvenes que repartían propaganda senderista por el lugar.

La presencia de féretros en aquella fecha significaba un homenaje a terroristas que habían muerto hace 30 años, y la fecha escogida era por el “Día de la Heroicidad” para SL.

Se registraron escenas de quema de antorchas en el techo del mausoleo, ritual similar a los que solían realizar los terroristas en los años 80. Además, resaltaba una escultura de una mano sujetando el mundo, que representa la negativa de los terroristas a rendirse, así como su deseo de continuar luchando hasta lograr sus objetivos.

La fiscal superior coordinadora de las Fiscalías Especializadas en Derechos Humanos y Terrorismo, Luz del Carmen Ibáñez, sostuvo en aquella fecha que, según información de la Policía, el mencionado sepulcro fue construido a fines de abril del 2016; sin embargo, el traslado del primer féretro se realizó el 19 de junio y el 7 de agosto se colocaron otros siete ataúdes adicionales.

Según información del Ministerio Público, la construcción del mismo costó alrededor de S/73,715.

Es decir, por cinco meses estuvo sin conocerse públicamente que el mausoleo terrorista se erigía en un cementerio de Comas. Luego, la Fiscalía inició una investigación para determinar si se cometió el delito de apología del terrorismo.

SENDERISTAS

Los cuerpos ubicados en el mausoleo pertenecen a exinternos del penal El Frontón que fueron ejecutados en 1986. Ellos se encontraban internados acusados por presunto terrorismo. El 18 de junio de ese año, durante el primer gobierno de Alan García Pérez, se desató un motín en varios penales en Lima, cuya respuesta fue la intervención de las Fuerzas Armadas.

Los 8 nichos eran ocupados por Juan Carlos Aponte Silva, Melchor Alarcón Coronado, Alejandro Chancasanampa Castro, Claudencio Mendoza Reyes, Feliciano Huamán Astuvilca, Joel Berchmans Canahualpa Valenzuela, Alfonso Esteban Gonzales Toribio y Segundo Alcibiades Chávez Díaz. Este último fue un peligroso terrorista que dirigió un cruento atentado contra dirigentes de Acción Popular en 1983.

Según el informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), un destacamento del autodenominado Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso atacó con ráfagas de metralla y explosivos el local principal del partido acciopopulista ubicado en el Paseo Colón, matando a dos personas y dejando heridas a 28.

En el momento del ataque, en el local se hallaban reunidas unas 200 personas. La idea fue acometer un ataque indiscriminado contra el corazón de la militancia. La modalidad del atentado fue decidida por Chávez Díaz, alias “Pedro”, jefe de los destacamentos especiales, quien ordenó que el ataque fuera de “aniquilamiento”.

“Eligió esta modalidad porque así disminuirían los riesgos para los atacantes y tendría mayor repercusión pública”, señala el informe de la CVR.

Se debe resaltar que la estructura del llamado mausoleo terrorista tenía capacidad para 51 nichos y que, según información policial, también iba a ser destinada a los restos de Abimael Guzmán Reynoso, Elena Yparraguirre y toda la cúpula de la organización subversiva.

Asimismo, se conoció que se tenía prevista la construcción de más nichos para albergar a los cabecillas.

TIEMPO

A pesar de que la publicación de Correo se hizo en el año 2016, la Municipalidad tardó más de dos años para la demolición. Esto debido a que tuvo que sortear una serie de impedimentos judiciales presentados por los familiares, quienes luego de cinco días de conocerse la noticia enviaron una solicitud al entonces fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, para hacerle de su conocimiento que se oponían a una eventual oposición.

También recurrieron a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la cual finalmente negó su solicitud de protección. Sin embargo, el panorama cambió cuando el legislador Alberto de Belaunde, vocero alterno de la Bancada Liberal, presentó un proyecto de ley que permitiría la demolición del mausoleo en mayo de este año, la misma que fue respaldada por el Congreso con mayoría y fue promulgada por el Ejecutivo en noviembre de este año.

En el intermedio también se trató de frustrar la demolición a través de amedrentamientos, cuando dos encapuchados empapelaron los exteriores de una emisora en Comas con pintas prosenderistas. Fue un día antes de que el alcalde sostuviera reuniones con la Policía para coordinar la demolición.

A ello se le sumó la campaña que inició el Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales (Movadef), a través de un hábeas corpus, para evitar la destrucción.

Sobre el tema, , autor de la iniciativa que permitió la demolición, indicó a Correo que lo único que hizo fue llenar un vacío legal existente en la ley de cementerios.

“Solo realicé mi labor como legislador, y de esa forma busqué no permitir que la situación que denunció Correo se mantuviera impune”, expresó.

En otro momento, el parlamentario comentó que el Municipio y el Estado peruano están respetando los derechos de todos.

“La demolición es una victoria del Estado de derecho del Perú, de ese Estado que quiso ser destruido en los años 80 y 90”, manifestó.