No cesa el tráfico en la avenida Javier Prado, incluso con las medidas recientes de restricción vehicular impuestas por la Municipalidad de Lima.

La situación caótica perdura en la conocida avenida limeña debido a un paradero informal de vehículos colectivos, los cuales transportan a los ciudadanos ajetreados por el día a día en la capital.

Son decenas de carros y vans que no llegan nunca a ser detenidos por las autoridades. Los operativos son puestos en marcha, pero en simultáneo los informales desvían sus trayectorias hasta que los efectivos abandonan con resignación el lugar.

En ese momento, vuelven a su ruta habitual, que va desde desde Ceres (Ate) hasta La Marina. Los vehículos informales se trasladan sin inconvenientes porque tampoco respetan la medida de 'pico y placa', y por ello el caos se mantiene en la Javier Prado.

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