Han pasado dos semanas del incendio en el botadero municipal de Moquegua y los efectos todavía se sienten en los poblados cercanos al siniestro.

La quebrada donde se acopiaban los desechos de la ciudad continúa ardiendo. Las brasas sigue vivas, ocasionando que el humo alcance el distrito de Samegua y el centro poblado de Chen Chen.

Durante las madrugadas se percibe un olor desagradable en los mencionados sectores. Algunos moradores han conectado el humo con el malestar en la garganta.

En el botadero se acopiaban sobre todo plásticos, éstos tras incendiarse emanan gases tóxicos.

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